Finalmente, tras tres años apelando a la Navidad y a la edad de su madre, Francisco Granados podrá salir de la cárcel. Será este miércoles, tras 33 meses encerrado en la prisión de Estremera de manera provisional por haber liderado presuntamente la trama de corrupción Púnica, según ha adelantado Ok Diario.

Tras dejar atrás los barrotes, a Granados se le impondrá la obligación de acudir al juzgado los días 1 y 15 de cada mes. También tendrá que dar su teléfono, su correo electrónico y fijar un domicilio fijo para estar siempre localizado y no podrá dejar el país sin permiso del juez.

El juez le había impuesto una fianza de 400.000 euros, pero su abogado aseguró que le era imposible pagarlo. A cambio, el letrado ofreció tres soluciones: que le bajaran la cuantía a 120.000 euros porque era todo lo que tenía disponible; que le desbloquearan una cuenta bancaria con 630.000 euros obtenidos de la venta de parcelas en Valdemoro; o que se realizara una fianza hipotecaria por el valor de la casa de su madre en Valdemoro, un piso de su hermano en Madrid, un terreno rústico de 8.600 m2 y una parcela de su cuñada.

Finalmente, esta última opción es la que habría aceptado el juzgado, en concreto, una fianza hipotecaria sobre el piso de su madre y la parcela de su cuñada.