Después de la vuelta -con fuerza- de Los Toreros Muertos, Many Moure, su bajista y cofundador, presenta un nuevo trabajo en solitario: Poesía bailable, un libro – disco en el que ha puesto música a nueve poemas del poeta y activista cubano Nicolás Guillén, con el objetivo de “reivindicar su figura y hacer algo que llevaba tiempo queriendo hacer: musicar sus letras. Nada más lejos de mi personalidad que la literatura, pero estos textos me vinieron de una relación personal, y me conquistaron”, cuenta el artista.
La obra, publicada con la editorial Ya lo dijo Casimiro Parker, que consagra su catálogo a la poesía, y ha ilustrado Manuel Ramudo, presenta música con cierta distancia de aquella a la que nos tenía acostumbrados en la banda que lideró con Pablo Carbonel. Aquí nos trae un son latino, aunque con un baño eléctrico. “La base y mayor influencia en todo esto sería Santana, claro”. Todo, para unos versos “profundos, cuidados y comprometidos política y socialmente. Hay referencias a Ciudad Juárez, a la prostitución, letras tristes a veces”. Crea, en conjunto, una poesía bailable, “donde la palabra ocupa un lugar destacado, pero además se puede bailar. Creo que la poca afición que existe hacia la poesía se debe en parte a que se ha envuelto de demasiada solemnidad y aburrimiento”.
Moure cuenta que “sacar un libro tiene que ver con el 4% de IVA que pagan los libros, frente al 21% de los discos”. En el trabajo ha integrado las colaboraciones del trompetista de jazz Jerry González, “que fue un gran aporte latino”, la cantante Mercedes Ferrer, “con quien también tenía ganas de colaborar desde hace años”, y Daniel Melingo, “el nuevo tango”. El artista asegura que entre su etapa de Los Toreros Muertos y la actual “la industria musical ha cambiado por completo, pero no sabría decir si para bien o para mal. El formato CD no llegó a cuajar, por ejemplo. Sí sé que, cuando proyectos como el de Toreros Muertos no las tienen todas consigo, es mejor que se tomen un tiempo, como hicimos”. Es un buen conocedor de América Latina, “he pasado allí una larga temporada. Allí todo es más complejo pero más auténtico. Y nos quejamos de lo que hay aquí…”.