No sé en realidad qué es la Alt Lit, aunque he tratado de enterarme. No lo sé con certeza y tampoco me importa mucho porque, en líneas generales, uno pilla la idea: nihilismo, tedio, vagabundeos por la ciudad, borracheras en fiestas, empleos mal pagados, sexo sin compromiso, adicción a internet, escritura como vía de escape, crítica al capitalismo y, al mismo tiempo, sometimiento a los dictados de las marcas y del consumo. Y porque lo que importan no son los tópicos ni las clasificaciones, sino contar una historia con las herramientas adecuadas. ¿Alt Lit? Sólo es una etiqueta.


Noah Cicero se propone, en la introducción, dar voz a los suyos: Yo quería escribir un libro. Un libro que definiese una generación. No sé por qué quería hacerlo. Probablemente por aburrimiento. Como en los textos de Tao Lin (que aquí aparece camuflado con otro nombre), los jóvenes van de aquí para allá, cenan en restaurantes, acuden a reuniones, se lían con hombres y/o con mujeres, hablan de lo divino y de lo humano… Pero nada parece motivarles, como si todo estuviera vacío, como si nada tuviera sentido. Benny Baradat (el álter ego de Noah Cicero) vive en Youngstown. Hacia la mitad de la novela viaja en autobús a Nueva York para ser retratado en una revista junto a otros escritores. Los devaneos de Baradat entre fiestas, locales, calles y comedores sólo son la excusa para plasmar a su generación: casi todos los personajes provienen de familias desestructuradas, disfuncionales… madres alcohólicas, padres que se largaron a por tabaco y no volvieron, hijos que, por culpa de esa educación, acaban sumergidos en una mezcla de fracaso, aburrimiento e intentos de suicidio…


Cicero, en este libro claramente autobiográfico, critica el capitalismo y todo ese sistema que se rige por hacer lo correcto: trabajar, consumir y prosperar porque eso puede suponer la felicidad. De ahí el título original, Best Behavior.


He mencionado antes a Tao Lin. Pero en esencia son diferentes. Aunque Lin sabe esbozar el vacío actual de su generación, la prosa de Cicero es más contundente, más poderosa, está llena de ideas. El escritor de Ohio salpica la página de alegatos, de invectivas furiosas, de frases que impactan por su verdad y por su naturalidad: Lo único que nos mantenía en ese trabajo era el hecho de que no hubiera otros empleos. / Tenía un montón de problemas, un coche de mierda, facturas que pagar, un trabajo de mierda, nunca había sentido que perteneciera a ningún sitio. / Sea como sea, la mayoría de los humanos consideran que el baile de fin de curso es el culmen de su vida en este planeta. Su estilo, directo y agresivo, es su mejor baza.