Hamza Zaidi (Tetuán, 1997) es un influencer de ascendencia hispano-marroquí que ha emergido como un fenómeno en las redes sociales. Ahora, a sus 26 años, da un paso significativo hacia la gran pantalla con su última película, Ocho apellidos marroquís. Hamza Zaidi forma parte de una generación de creadores de origen extranjero que están ocupando espacios destacados en la sociedad española. Rompiendo barreras y tabúes. La diversidad es un aspecto crucial en cualquier sociedad moderna. La presencia de inmigrantes en roles relevantes proporciona representación a una parte significativa de la población, permitiendo que sus voces, experiencias y perspectivas sean visibles y valoradas. Asimismo, ver a personas inmigrantes alcanzar posiciones influyentes puede ser inspirador para otros inmigrantes y jóvenes en general. Su presencia desafía estereotipos y muestra que el origen étnico o nacionalidad no limita el potencial individual.

En aras de conocer en profundidad a Hamza Zaidi, ElPlural.com ha mantenido una conversación telefónica con el actor.

Pregunta: 8 apellidos marroquís, ¿cómo ha sido enfrentarte al reto de la actuación?

Respuesta: Nunca mejor dicho, todo esto es una movie. Pero ha venido en un gran momento. Es una película que va a encantar a la gente y más en Navidad. Siempre existe la polémica de que los marroquíes piensan que se van a meter con ellos y los españoles, más de lo mismo. Al final es parodiar personajes que existen en la vida real.

P: El humor es una manera única de tender puentes.

R: Precisamente, creé un personaje para redes sociales en el que hacía España vs Marruecos. Nací en Tetuán y a los tres años vine con mi familia a España. Conozco bastante bien ambas culturas y he sabido utilizar la parodia y la exageración como modo de expresión para hacer humor. De esta manera, rompes estereotipos. Lo importante es estar unidos y ver que somos más parecidos de lo que creemos.

P: Al final, este tipo de creaciones culturales no son solo humor. También son política.

R: El humor es la mejor vía para todo. Puedes contar las cosas de forma seria y que acaben por convertirse en densas y aburridas. El humor, incluso con pullitas, es una gran manera de explicar las cosas. El humor no deja de ser más que una manera divertida de ser serios. Por ejemplo, los protagonistas interpretados por Michelle Jenner y Julián López son la típica pareja conservadora, de Cantabria… Gente cerrada con la imagen de que en Marruecos te van a robar y donde solo hay terroristas. Sin embargo, luego llegan y se dan cuenta de que nada es como lo pintan. De todas formas, en temas políticos no me meto.

P: ¿Qué puede aprender alguien con prejuicios al ver la película?

R: Los personajes conservadores que se caricaturizan en la película existen en España. Es un hecho. Pueden pensar que al entrar en Marruecos no van a acabar vivos. Y quien vea la película desde el prejuicio se va a dar cuenta de que la realidad es diferente. Además, van a poder ver las cosas desde diferentes perspectivas. Y mola eso de cambiar la mentalidad de la gente.

P: Tu historia es similar a la de millones de personas criadas entre dos tierras. El ser el español allí y el marroquí aquí. ¿Cómo llevas esa dualidad?

R: Es algo que nos pasa a todos los inmigrantes. Bajo todos los veranos a Marruecos y soy el españolito. Es un contraste con el que debemos convivir. Son dos culturas que, a pesar de las diferencias, son similares. Lo único que nos separa son 12 kilómetros. Yo he sido afortunado porque he podido contar mi historia y he sido de los primeros referentes para los marroquíes en España. Ahora hay más.

P: Al final, lo importante para los inmigrantes es ir ocupando espacios reservados tradicionalmente a los locales.

R: Eso está pasando con el contenido audiovisual. Sin embargo, a los racializados nos meten siempre en el mismo saco. Por ejemplo, interpretar a terroristas, yihadistas, siempre de malos. Ahora estamos luchando por que eso cambie. Nosotros hemos sido los primeros en aparecer en España siendo imagen de otros países. Y podemos ayudar a las futuras generaciones.

P: ¿Tuviste el corazón divido en el España-Marruecos del Mundial?

R: Es curioso. De hecho fui a Qatar. Estuve en las semifinales contra Francia. ¿Sabes qué pasa? Ahora Marruecos tiene muy buenos jugadores y mi corazón en ese momento estaba con ellos. Además, España ya me ha dado muchas alegrías. El Mundial 2010 fue increíble. 

P: En 2030 compartimos Mundial, de hecho

R: Tiene muy buena pinta eso. La convivencia al final va a tener que ser.

P: Por cierto, ibas para periodista.

R: Sí, sí. Estuve matriculado en periodismo en la Complutense de Madrid. Lo dejé tras el boom que viví en redes sociales.

P: Hiciste bien, créeme

R: Al final la carrera universitaria es importante, pero la puedes recuperar en cualquier momento. Pero tenía que aprovechar la ola de popularidad en redes.

P: Y has hecho más comunicación en estos años que toda tu generación de la universidad.

R: No llegué ni a terminar primero, fíjate. Tras ganar notoriedad, me llamó Vodafone You para colaborar con ellos. Con gente como Dani Mateo, algo increíble. Yo trabajando ahí y la gente de mi clase flipó. Y se picaron un poco. Es triste, pero tener contactos es más importante que tener una carrera universitaria.

P: Entre tú y yo, eso era envidia.

R: Al final les entendía. Les quedaban tres años y medio para terminar y yo que lo había dejado mira dónde estaba. Y entiendo que joda un poco. Al final, muchos periodistas o actores no tienen carrera y están ocupando puestos importantes.