Quedan apenas 24 horas para que los Reyes de Oriente lleguen a nuestras casas. Pero la pregunta que ronda en nuestras cabezas no es qué nos traerán Melchor, Gaspar o Baltasar sino cómo nos gusta el Roscón. ¿Con nata o sin nata? ¿Será esta la encuesta definitiva que acabe con conflictos familiares? ¡Vota!