Con la majestuosidad de la sierra guardando sus espaldas y un vasto océano de olivos que se extiende bajo sus pies encontramos en el corazón de la provincia de Córdoba el pueblo de Rute, una pintoresca villa famosa por sus destilerías de anís, sus museos gastronómicos y su impresionante belén de chocolate, que es el más grande del mundo. 

Estratégicamente ubicado a igual distancia de cuatro capitales andaluzas, el municipio es un refugio gastronómico y un tesoro histórico y de belleza natural, con gran parte de su territorio abrazado por el Geoparque de las Sierras Subbéticas. Todo esto convierte a Rute en un destino privilegiado, perfecto para aquellos que buscan disfrutar en un entorno auténtico y lleno de encanto.

Rute a lo largo de la historia

La villa de Rute tiene raíces paleolíticas y neolíticas que se evidencian en los hallazgos de la Cueva Negra, situada en la Sierra de la localidad, aunque su historia se desarrolló realmente durante la romanización y especialmente en la Edad Media bajo influencia árabe. Durante la Reconquista, el lugar jugó un papel militar importante, cambiando de manos entre musulmanes y cristianos, hasta su conquista definitiva por Ramiro Yañez de Barrionuevo en 1435.

Posteriormente, la villa se trasladó a su ubicación actual y pasó a las manos de los Fernández de Córdoba en 1466. Destaca la figura de Francisco Fernández de Córdoba, un célebre “Abad de Rute” del siglo XVI, reconocido por ser un célebre escritor, canónigo y archivero de la catedral de Córdoba.

¿Qué ver en Rute?

Rute es un destino turístico fascinante, conocido por su patrimonio industrial convertido en Museos Gastronómicos que aún elaboran productos tradicionales como anisados, licores, mantecados, turrones, chocolates y chacinas. Destaca entre sus calles el Monumento al Anís, erigido en 1995 en honor a la tradición local de fabricación de anís.

Museo del Anís, en Rute, Córdoba.

Además, Rute alberga iglesias históricas como la Parroquia de Santa Catalina Mártir, fundada en 1497 con un retablo neoclásico terminado en 1790 y un notable patrimonio escultórico y de platería; la Parroquia de San Francisco de Asís, originaria del siglo XVI con destacados elementos rococó; y el Santuario de Nuestra Señora del Carmen, del siglo XVII, hogar de la patrona de Rute, la Virgen del Carmen.

Otras ermitas de interés son la de San Pedro, conocida por su arquitectura sencilla y el Cristo de la Expiración del siglo XVI; y la de Vera Cruz, con su retablo mayor del siglo XVIII y pinturas al fresco. Finalmente, la Ermita de San Sebastián, cerca de la Parroquia de Santa Catalina, ofrece una mezcla única de arte y arquitectura religiosa.

Por otro lado, los patios y rincones de la Subbética Cordobesa, con su arquitectura única y diversa, son elementos distintivos de la región. Estos espacios varían en diseño, desde construcciones centenarias hasta versiones más modernas. Originalmente, en las casas de vecinos habitadas por familias de escasos recursos, los patios servían como centros comunitarios, decorados con plantas, macetas, fuentes, y elementos decorativos y utilitarios.

Patio típico cordobés ubicado en el pueblo de Rute.

Con el tiempo y el cambio en la construcción residencial y la vida social, muchos de estos patios han desaparecido, aunque en las poblaciones más pequeñas aún se conservan. De origen islámico, el patio cordobés se diseñó para ventilar e iluminar las casas, convirtiéndose en un importante lugar de convivencia familiar y vecinal.

El belén de chocolate más grande del mundo

El Belén de Chocolate de Rute, una tradición emblemática en Córdoba, se erige cada año como una obra de arte culinaria única. Este año 2023, la temática del Belén de Chocolate es un "viaje de oriente a occidente", representando monumentos y lugares icónicos de distintas partes del mundo, divididos en tres grandes zonas: Europa, Oriente Medio y Asia. Entre las representaciones destacadas se encuentran el Big Ben de Londres, la cordillera del Himalaya, y la Catedral de Santa Sofía de Estambul, todo elaborado con más de 1.500 kilogramos de chocolate, incluyendo chocolate blanco, negro, con leche y fondant.

La creación de este belén es un proceso meticuloso que comienza después de Semana Santa y se extiende durante la primavera y el verano, involucrando el trabajo de hasta seis maestros chocolateros especializados. Cada año, la representación navideña se supera en tamaño y complejidad, y en esta ocasión ocupa más de 60 metros cuadrados, utilizando predominantemente chocolate blanco por su facilidad para ser coloreado y lograr un mayor impacto visual.

Abierto al público desde octubre hasta enero, el Belén de Chocolate se integra con la oferta turística local, que incluye museos de turrón, azúcar, anís, y jamón, enriqueciendo la experiencia de quienes visitan el municipio durante la temporada navideña.

Un pueblo rodeado de naturaleza viva

La innegable belleza de la naturaleza alrededor de Rute invita a los visitantes a explorar las atracciones naturales de la región. Entre ellas se encuentra la Encina Milenaria, ubicada en la aldea de los Llanos de Don Juan, se destaca por su gran tamaño y longevidad, siendo un Monumento Natural de unos 400 a 450 años de edad

En cuanto a construcciones históricas situadas en plena naturaleza encontramos El Canuto, una torre almenara de origen cristiano que se erige en el pico montañoso "Hacho" y ofrece vistas panorámicas excepcionales. Este sitio es un recordatorio tangible de las luchas fronterizas medievales, un lugar que sumerge a los turistas en la historia mientras disfrutan del paisaje. 

Por otro lado, la Garganta del Río la Hoz es un paraje natural que cautiva con sus cañones y formaciones de roca caliza, así como con sus saltos de agua y cascadas. Y el Embalse de Iznájar, conocido como el 'lago de Andalucía', se presta para una variedad de actividades al aire libre como los deportes náuticos y la observación de aves.

Embalse de Iznájar, conocido como el 'lago de Andalucía', situado en Córdoba.

Por último, la Sierra de Rute, parte del Parque Natural de las Sierras Subbéticas, ofrece oportunidades para el senderismo, el ciclismo de montaña, y otras actividades al aire libre, destacándose por su diversa flora y fauna. La región también cuenta con varias rutas de senderismo, como la de la Sierra de Rute y el Pinar de Rute, brindando a los visitantes la oportunidad de explorar la belleza natural y la tranquilidad del entorno.