Pese a que Extremadura es de interior, no tiene playa y las temperaturas en verano suelen ser altas, se puede disfrutar del verano gracias a su potencial natural, entre el que destacan ríos, valles y embalses en preciosos entornos para bañarse y refrescarse, además de contar con buenas zonas para practicar senderismo y hacer excursiones. A continuación, se detallan algunos de los lugares más fabulosos para disfrutar de la naturaleza extremeña según el portal oficial de turismo de España:

1. La Vera

La Vera es una de las comarcas más frecuentadas de Extremadura, sobre todo en verano. Esto se debe a la gran cantidad de zonas acuáticas que alberga y en las que se puede disfrutar de un baño relajándote del calor y refrescándote. Entre muchas, destacan las piscinas naturales del Madrigal de la Vera, en un precioso enclave protagonizado por un puente de piedra de origen romano.

Puente de Alardos. Wikipedia Marianne Perdomo

2. Los Barruecos

Este paraje natural protegido se encuentra en Malpartida, Cáceres. Aquí se podrá avistar una abundante fauna y flora, así como contemplar las increíbles formaciones geológicas que se distribuyen por la zona, entre las que destacan las grandes rocas de granito. También hay varias esculturas, como el ‘Viaje de Hormigón por la Alta Extremadura’ de Wolf Vostell, o antiguos restos arqueológicos que datan del neolítico y el megalítico.

Los Barruecos

3. La Chorrera de Hervás

Cerca del pequeño y encantador pueblo de Hervás, en pleno Valle del Ambroz, se puede coger un sendero que lleva hasta un espectacular salto de agua de unos 30 metros de altura. El recorrido hasta la cascada transcurre entre un bosque de robles y castaños, que brindan sombra, y con el transcurso del río Ambroz a un lado.

La Chorrera de Hervás. Wikiloc

4. La Garganta de los Infiernos

En el Valle del Jerte, al norte de Cáceres, se encuentra esta preciosa y conocida garganta con varios saltos de agua, cascadas y pequeñas piscinas naturales. En este paraje se puede apreciar el desgaste que ha producido la acción del agua sobre las rocas, formando peculiares formas y estanques, que son perfectos para disfrutar de un baño. No obstante, los más famosos son los llamados pilones, unas grandes pozas circulares.

Garganta de los Infiernos. Europa Press

 

5. Meandro del Melero o Ríomalo

Por último, este escenario se trata de un auténtico capricho de la naturaleza en el río Alagón. Aquí, el río da un llamativo giro formando una pequeña península repleta de frondosa vegetación. Es uno de los escenarios más destacados para practicar senderismo en Extremadura, caminando por zonas donde la vegetación es muy variada y abundante y el calor se soportará mejor.

Meandro del Melero