Los helados son el producto que no suele faltar en la nevera de las familias cuando llega el verano, aunque los nutricionistas no los recomiendan por su gran aporte calórico y proteico.

Si no puedes pasar el verano sin refrescarte con los helados, te agradará saber que algunos de los que venden en los supermercados apenas engordan. Te ayudamos a elegir los más saludables para evitar tentaciones:

Cremoso de Limón de Hacendado

Como no podía ser de otra forma, Mercadona tiene uno de los helados que menos calorías aporta la unidad y más barato sale, cuatro unidades por 1,71 euros. Este helado no tiene azúcares añadidos y apenas tiene sal y calorías: cada unidad tiene 39 kcal y 0,8 g. Está hecho a base de agua, zumo de limón y múltiples aditivos, por eso no es recomendable tomarlo diariamente.

Cremoso limón, Mercadona.

Solero de Frigo de mango, piña, frutos rojos o melocotón

Para los amantes de la fruta deben elegir estos de Frigo que sacaron el año pasado, están compuesto por 65% de fruta.

Dependiendo el sabor el aporte de calorías es diferente, el que menos tiene es el de frutos rojos solo 34 kcal la unidad y el que más el de mango, 40 kcal. El precio de cinco unidades es 3,32 euros.

Si prefieres el formato tarrina, por cada 100 ml/ración supone de 76 a 79 kcal

Solero de Frigo

Tarrina Alpro de vainilla de Madagascar, chocolate y avellanas o almendra caramelizada

Estos helados los puedes encontrar en El Corte Inglés, son 100% vegetal, ricos en fibra y con un 30% menos de azúcares y grasas saturadas que los helados similares que venden en los supermercados.

Cada ración supone entre 56 y 62 kcal y su precio es de 5,99 euros 340 gramos.

Alpro

Según indicaciones de la OCU, si un helado es ‘light’ o ‘sin azúcares’ no significa que no engorde, “porque el azúcar no es el ingrediente que más energía aporta a los helados, sino las grasas, y los productos sin azúcar también suelen llevar”.

Como apunte final, se puede afinar el arte culinario y recurrir a helados caseros, es una tarea fácil y tan solo se necesita tres ingredientes: una fruta, una tableta de chocolate negro y aceite de coco. Solo hay que batir la fruta, introducirla en moldes de helado y al congelador.  Por último, simplemente bastará con añadir el chocolate fundido mezclado con el aceite de coco por encima de los helados de fruta. Esta opción es la aconsejada por los nutricionistas.