Comer fuera de casa no siempre es una tarea sencilla. Sin embargo, tampoco debe suponer un osbtáculo para dejar de lado una dieta sana y equilibrada. A continuación te damos algunos consejos para que te des cuenta de que comer bien, pasar un buen rato y tomar alimentos saludables es posible.

Elige el mejor restaurante

Muchas veces vamos al primer restaurante que encontramos; y esto puede sair bien, pero también mal. Por ello, es preferible abordar el asunto antes de salir de casa, siempre teniendo en cuenta nuestras preferencias. En este sentido, si lo que más te gusta es la carne un asador siempre es una opción de calidad. Si prefieres el pescado y vives cerca del mar, prácticamente lo tienes hecho. Otras opciones muy poco grasas son los vegeterianos o veganos y la comida japonesa.

Come algo sano antes de salir de casa

Comer fuera es sinónimo a veces de "no comer mucho en casa", porque así comeremos más fuera. Sin embargo, esto no es para nada recomendable, ya que nos puede hacer arrasar con todo y, en ocasiones, con comida muy pesada. Lo ideal es desayunar como cualquier otro día e, incluso, comer una pieza de fruta o un snack antes de salir.

Siempre alimentos simples

Que un alimento sea más simple no implica que te deje con hambre. Se trata solo de elegir la opción más saludable entre dos platos. Por ejemplo, entre nachos con guacamole o con queso y chorizo, los primeros son más saludables; entre una hamburguesa grasa y otra con más verdura, es preferible escoger la segunda. Ninguna de estas opciones te dejará con hambre, más bien todo lo contrario, pero saldrás del restaurante con una menor sensación de pesadez.

La indecisión, tu peor enemiga

Si ves algo rico y saludable no dudes en pedírtelo. Revisar demasiado la carta puede hacernos caer en la tentación; ya que los restaurantes presentan casi todos sus productos de la manera más sana y más atractiva posible. En una línea similar es mejor pedir antes que tus acompañantes, para que no te sientes condicionado.

Pide para compartir

Si pides un plato y te arrepientes, tiene solución, ya que siempre puedes compartirlo con alguien. Asimismo, si hay un entrante que tiene muchas calorías pero te apetece mucho, también puedes compartirlo con las personas a las que acudas a comer. Esto no solo te ayudará a estar sano, también te permitirá ahorrar. La decisión es igual de apta para los postres.

Come despacio

Comer rápido hará que te llenes antes y, seguramente, dejes más comida en el plato. Este consejo no es tanto para comer saludable como para disfrutar de la comida y de la compañía. 

Cuidado con la bebida

Ni que decir tiene que lo más sano es beber agua. Ahora bien, si te apatece tomar vino o cerveza no lo tienes prohibido. Eso sí, entonces bebe antes un vaso de agua y no abuses del alcohol. Lo mismo sucede con los zumos o bebidas azucaradas.