Las elevadas temperaturas que trae el verano y, concretamente, las olas de calor que elevan el mercurio hasta límites extremos en muchas regiones, son uno de los problemas más afectan en la conciliación del sueño. Hay una serie de recomendaciones que se pueden llevar a cabo para evitar el insomnio en estos meses de calor, y también hay una temperatura ideal para dormir.

La temperatura nocturna ideal para dormir ronda los 22 grados, pero en verano se supera con creces esta cifra en muchos casos, lo que crea profundos problemas de sueño. El motivo es que por encima de los 21-22 grados el mecanismo de refrigeración del cuerpo se pone en marcha e interfiere con el sueño. Lo mismo sucede con el frío: por debajo de los 12 grados el cuerpo tiene que aumentar la actividad para calentarse.

No obstante, la temperatura correcta varia de una persona a otra, y es diferente en hombres y en mujeres. Por eso, los expertos han calculado que la temperatura perfecta en el dormitorio debe oscilar entre los 19 y 22 grados. No se debe abusar del uso del aire acondicionado y poner temperaturas muy bajas, ya que puede provocar catarros.

Consejos para dormir fresco en verano

  1. Tener una rutina: para ayudar a conciliar el sueño es importante tener una rutina diaria, para que el cuerpo se habitúe y sepa cuando es la hora de irse a dormir. Se pueden establecer unas franjas horarias aproximadas para levantarse y acostarse, así el cuerpo se acostumbrará a ese horario.
     
  2. Ducha con agua tibia: tomarse una ducha de agua tibia antes de irse a dormir ayudará a conciliar mejor el sueño y a tener una sensación de fresco más duradera que si se hace con agua fría.
     
  3. Humedecer puntos clave del cuerpo: cuando el calor es intenso y tengamos problemas para dormir se puede refrescar partes concretas del cuerpo, como cuello, muñecas, codos y tobillos. Al enfriar estas zonas se repartirá el frescor al resto del cuerpo.
     
  4. Ropa de cama y pijama ligeros: es importante elegir un tejido ligero y transpirable, como el algodón. También es mejor utilizar ropa holgada que ajustada. No obstante, también se puede optar por dormir sin ropa.
     
  5. Hidratarse: con el calor es importante mantener el cuerpo bien hidratado ya que se necesitará más cantidad de agua para funcionar y mantener el cuerpo en una temperatura óptima. Se puede tener un vaso o una botella en la mesita de noche para beber durante la noche.