34 candidaturas se presentan en España a las elecciones europeas del próximo domingo, 9 de junio de 2024. La cita electoral ha servido para conocer el parto múltiple de la ultraderecha que se ha venido gestando en los últimos años a la sombra del ascenso de Vox y que ha alumbrado nuevos partidos como "Se acabó la Fiesta" (SAF) o "Iustitia Europa"(IE). El auge de las teorías negacionistas y conspiracionistas en las redes sociales ha contribuido también a la consolidación de una hornada de organizaciones que se autocalifican de antisistema y anti globalistas.

La agrupación de electores SAF es una creación del agitador ultraderechista Alvise Pérez que se ha venido arriba por tener miles de seguidores en las redes y piensa que le puede dar un buen pellizco al electorado de Abascal. Tras Iustitia Europa están Luis María Pardo, de la asociación de abogados Liberum y promotor de varias querellas por los supuestos efectos perjudiciales de las vacunas contra el covid; Manuel Tinoco, uno de los líderes de las protestas de agricultores de enero bajo el nombre de Movimiento Rural Español y Roberto San Antonio, presidente de la asociación para la defensa de las terapias naturales que se querelló contra la ministra de Sanidad.

Las nuevas formaciones ultras comparten fobia a la Agenda 2030 y a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, que algunos denominan "Objetivos de Destrucción de la Sociedad" y rechazan el belicismo de la OTAN y todas las políticas y estrategias de la Unión Europea y los organismos transnacionales. También se abonan a la paranoia de las conspiraciones de poderes ocultos. Algunos de estos puntos son los que la Rusia de Putin ve como muy positivos y pueden ser la consecuencia de la financiación de Moscú a las formaciones de ultraderecha como se ha comprobado recientemente en Alemania.

El 9 de junio los electores se encontrarán con un variado repertorio de papeletas de la extrema derecha: Vox, Frente Obrero, Falange, Iustitia Europa y Se acabó la Fiesta. A las más veteranas Vox y Falange las conocemos desde hace años. Las otras que son más recientes pueden confundir por sus nombres que en algunos casos son equívocos.