Las duras escenas que vimos en el Congreso de los Diputados, con la derecha y la ultraderecha empeñados en desalojar al Gobierno del banco azul, utilizando el insulto y la mentira sin ningún recato, provocaron disgusto e inquietud. Como también causó desazón el clima desangelado entre las distintas formaciones, que se percibió en la conmemoración de la Constitución este 6 de diciembre.

Dentro de esa irrespirable situación ha entrado una brizna de brisa fresca: La propuesta del Padre Ángel, fundador de Mensajeros de la Paz, aprobada por la Mesa de la Cámara Baja el viernes último. El acuerdo supone que, en Nochebuena, la propia presidenta del Congreso, Meritxell Batet, junto con diputados que vivan en Madrid y funcionarios, en ambos casos de manera voluntaria, colaborarán en la distribución de bandejas de cenas para las personas que lo precisen. Mensajeros de la Paz llevará el catering y organizará el acto y el reparto, mientras la Cámara se hará cargo de los gastos.

Sería una buena cosa que representantes de todos los partidos participaran en ese evento solidario para que, como ha dicho el padre Ángel, frente a tanto ruido se refleje unidad política. Desde el Congreso se considera importante que la casa de todos los españoles abra sus puertas para colaborar con los más desfavorecidos. Esta es la quinta Nochebuena que el intrépido sacerdote pide ayuda a las instituciones en esta fecha señalada. Este año, debido a la pandemia, las cenas se entregarán en mano para su consumo en casa pero aquellos que lo deseen, podrán consumirlas en la iglesia de San Antón, también de Mensajeros de la Paz.

Es uno de los capítulos más de las miles que tiene en su haber este cura, que relató satisfecho a El Plural cómo su organización benéfica había conseguido cinco toneladas de alimentos para distribuir, manifestando su convicción de que este año la desgracia llevará a compartir más

Viendo el entusiasmo y la fe en el género humano del padre Ángel, se han de afear opiniones mezquinas como las del periodista Federico Jiménez Losantos, que tiene al cura entre los múltiples objetivos de su venenoso discurso. En una reciente entrevista relató: “Salió defendiendo a Setién y de pronto subo en el ascensor de la COPE y entra él y me ve. Le dije: ‘Usted es un cabrón y va a ir al infierno. Porque para usted, si está cerrado, se abrirá’”. 

De preguntar a los Santos qué le parece esta nueva iniciativa para la cena de Noche Buena en el Congreso, se puede imaginar lo que podría soltar el periodista. Ocurre que hay personas a las que les hiere que su enemigo disculpe tus ofensas. Seguro, que el padre Ángel ya lo ha perdonado.