En aquella época, principios de la democracia, Alberto (entonces aún era Alberto más que Núñez Feijoo), militaba en un sindicato de los llamados profesionales. Ahí tienen la prueba, el folleto delator. El sindicato se llamaba ‘Fica’, un nombre un poco de película de la época, de las de Alfredo Landa: Agrupación de Funcionarios Interinos e Contratados Administrativos.

Estabilidad del puesto de trabajo público
Un grupo que reivindicativos, pero ‘formales’ (a tenor de su apariencia), reclamaba conforme al panfleto demostrativo, “el acceso a la Función Pública de todos los interinos y funcionarios”, y que se les asegurara “la estabilidad en el puesto de trabajo”. Es más, exigía con sus compañeros el “reconocimiento de los interinos en la ley de presupuestos generales y el 100% de las retribuciones básicas y complementarias”.

Pedazo de reivindicación si la comparamos con lo que trae para las empresas públicas y las Administraciones la reforma laboral que propugna el gobierno de su compañero y amigo Mariano Rajoy. Ya saben, la que le va a costar una huelga, y la que el ministro de Hacienda ha calificado de ‘extremadamente agresiva’.

El 'sindicalista Feijóo' ahora tiene sindicalistas en las calles
Pero las viejas reivindicaciones del joven Núñez Feijóo tienen aún más gracia si se tiene en cuenta otro dato: que el gobierno gallego tiene de manifestación en manifestación a los miles de empleados públicos, que, como si no pasara el tiempo, ahora le piden a él que retire las medidas de recorte que propone la Xunta, entre las que se encuentra la reducción de jornada y no abonar el complemento a las personas de baja en los 21 primeros días.

Ya lo decía Rubén Blades…  “Sorpresas te da la vida, ay, ay, ay…”.

 

¡Ah!, aunque los que vivan en A Coruña, y quizás otros,  ya lo hayan reconocido, no se pierdan a otro de los que aparece en la foto… Sigan en la fila de arriba. Miren el que lleva gafas y jersey oscuro (en el redondel en azul) ¿Saben quién es?  Exacto, alcalde de A Coruña.