Seat es, indudablemente, una de las marcas que más apuesta por los vehículos de gas natural comprimido (GNC). Estos coches pueden ser propulsados bien por gasolina o bien por este gas, por lo que se trata de vehículos con tecnología bifuel -no confundir con tecnología híbrida-. ¿Crees que lo sabes todo sobre ellos? A continuación la marca española, a través de Andrew Shepherd -responsable de Producto de GNC de Seat-, desmiente siete falsos mitos acerca de este tipo de mecánicas GNC.

¿Qué sensaciones ofrecen al volante?

La idea de que conducir un coche propulsado por GNC es diferente a la de conducir un coche ´convencional´ es falsa. Según el experto de Seat, "la sensación circulando es la misma, ya que las prestaciones de los motores de gas son idénticas a las de los coches diésel o gasolina con la misma potencia".

¿Es seguro un depósito de gas?

Por supuesto. Shepherd explica que "los depósitos de gas están diseñados, fabricados y homologados según los estándares más altos de la industria. Incluyen una válvula de seguridad que, en un caso extremo, evacuaría el gas a la atmósfera de manera controlada. El depósito alcanza una presión máxima de unos 200 bares, pero está diseñado para poder soportar más del doble". Además, es imposible que el gas se congele, pues para ello necesitaría estar sometido a temperaturas inferiores a los 160º bajo cero.

¿Se puede circular con un coche de GNC en episodios de alta contaminación?

Están clasificados con la etiqueta ECO de la DGT, por lo tanto, pueden circular sin restricciones. Además, tienen un 75% de descuento en el impuesto sobre vehículos de tracción mecánica, la exención del pago del impuesto de matriculación y descuentos en aparcamientos y peajes.

¿Se puede continuar circulando si se acaba el gas?

Sí, ya que cuando el gas se agota el coche es propulsado directamente por el depósito de combustible. No hay necesidad de parar para ello, simplemente el coche informa del cambio a gasolina a través de un testigo luminoso en el cuadro de instrumentación. De hecho, gracias a esta tecnología se pueden recorrer hasta 1.300 km sin repostar.

¿Es posible circular solo con gas?

Sí. Un vehículo de GNC circula por defecto con gas; no obstante, es recomendable llevar algo de gasolina en el depósito de combustible -y consumirla en un período de unos 6 meses- para que el coche pueda utilizar gasolina para arrancar si el clima es muy frío o justo después de repostar GNC.

¿Es mucho más alto el precio?

En absoluto. Es similar al de coches diésel o gasolina, e incluso tiene beneficios a largo plazo ya que llenar el depósito cuesta unos 13 euros, lo que permite ahorrar aproximadamente un 30% y un 55% en este sentido si los comparamos con vehículos diésel o gasolina, respectivamente.

¿El mantenimiento es parecido?

Sí; ningún elemento mecánico de los coches de GNC tiene un desgaste mayor al de un automóvil diésel o de gasolina simplemente por el hecho de poder funcionar con gas. Lo único que los diferencia es que antes de cada inspección de ITV se tiene que certificar la estanqueidad del sistema de gas y cada 4 años realizar una inspección visual de los depósitos en un taller especializado.