El debut cinematográfico de la escritora y directora Camille Griffin es una mezcla ambiciosa de comedia navideña y drama apocalíptico. Griffin ha elaborado un cuento con moraleja sobre el cambio climático, y lo ha evasado, paródicamente, en una acogedora comedia romántica británica al estilo de Richard Curtis, protagonizada por una figura clave de Love Actually: Keira Knightley.

En plenas fiestas, una nube tóxica gigante se extiende por todo el planeta, resultado de un abuso y negligencia colectivos irreparables.Todo apunta a que acabará con la vida de un grupo heterogéneo de familiares y amigos en una elegante finca inglesa en algún momento después de la medianoche, dando un significado completamente nuevo a Last Christmas de Wham!.

El día comienza con la combinación habitual de alegría y pavor cuando las parejas y las familias se reúnen para una fiesta de Navidad. Todo el mundo está demasiado vestido. Amigos que solo se ven una vez al año, tensiones acumuladas, recuerdos y reproches enquistados… Una farsa habitual que este año tiene el trasfondo de amenaza, la de una muerte inminente. La tensión de esa Noche de paz acaba revelando quiénes son realmente todas estas personas. Griffin oscila entre sus instintos cómicos iniciales y un tono apocalíptico, melodramático. Hay preguntas sin resolver relacionadas con la inconsciencia. Por qué todos se abandonan a la fiesta sin haber pensado en cuidarse a ellos y sus seres queridos.