Películas y series tratan de mostrarnos cómo será el futuro de la Humanidad. Pero, por exigencias del guion, en esos futuros, los robots no suelen ser muy amistosos. Así que tenemos dudas sobre ellos. Pero lo cierto es que los robots están aquí para ayudarnos. En materias tan sensibles como la cirugía del ojo.
Menos invasivasLas intervenciones quirúrgicas se están mecanizando cada vez más. Los nuevos sistemas permiten operaciones menos invasivas, con mejores pronósticos y, sobre todo, más eficientes. Es lo que consigue el sistema Preceyes, que acaba de operar con éxito los ojos de ocho personas.
La aportación de la máquina es muy relevante, pero todavía ha de ser manejada por una mano humana. El cirujano emplea sus manos para manejar al robot para dar órdenes, no tanto para realizar la operación en sí.
Con un joystick
Preceyes es capaz de cortar la membrana que cubre el ojo con una precisión absoluta. La mano humana, incluso la más diestra, siempre tiene cierto temblor. El médico, manejando un joystick controla el escalpelo, pero es el robot el que realiza la incisión.
Para mostrar las diferencias, se realizaron intervenciones de cataratas según el sistema tradicional y otras con el ingenio robótico. El robot necesito incisiones de menos de 1 milímetro de diámetro, separó la membrana del ojo de la retina y retiró la catarata. El resultado fue una intervención más breve y, sobre todo, menos molesta y de menor tiempo de recuperación de los pacientes.
En vista del éxito obtenido, se ha aplicado el método robótico para otras intervenciones oculares más complejas como la eliminación de coágulos o hemorragias.
