No hace falta una película de animación, para que terminemos creando empatía con un robot. Quién no tiene sentimientos hacia esos cacharros que deambulan por planetas próximos o en el frío espacio y de los que de cuando oímos hablar. Por ejemplo, ahora estamos preocupadísimos con el Opportunity

Tormenta perfecta

Lo último que supimos de él es que estaba a punto de ser engullido por una de las fenomenales tormentas de arena del planeta rojo. No es que sean vendavales como los que conocemos en la Tierra, debido a su débil atmósfera. Pero el viento puede alcanzar los 100 kilómetros por hora y levantar gran cantidad de la arena refrita por la radiación solar. Cómo debió de ser la tormenta que el propio Opportunity envío la secuencia completa de cómo la nube de polvo ocultaba la luz del Sol.

En la NASA han tomado una decisión radical. Han apagado al Opportunity. Una decisión extrema, dado que nadie les garantiza que responda cuando se vuelva a activar, dado su delicado estado de salud y la tormenta que puede durar meses.

Descubrió el agua

Después llegar a Marte en 2003, con una esperanza de vida de varios meses y acabar con 15 años de impecable servicio. Él ha sido el gran responsable de que la idea de que en Marte hubo agua sea ya una certeza científica y la creciente posibilidad de que siga existiendo bajo la superficie rocosa. Precisamente en esas investigaciones andaba liado cuando le agarró la tormenta. 

También fue el impulsor y preceptor de Curiosity, cuyo proyecto se aceleró cuando se comenzó a comprobar que era posible con ingenios humanos manejados desde Huston. Y eso fue otro gran triunfo de la sonda con ruedas ahora perdida. 

Con todo, los ingenieros de la NASA no lo da por perdido y creen que volverá. Si ha resistido tanto tiempo contra todo pronóstico quizá en cualquier momento se sacuda el polvo y continúe su marcha.