Visibilidad, protagonismo, representación. En una sociedad patriarcal en la que vivimos, las mujeres han de seguir reivindicando su presencia en todos los entornos. Y especialmente en los relativos a la cultura, el espectáculo y el entretenimiento.

Es sintomático que una industria relativamente reciente como es la de los videojuegos siga adoleciendo de los mismos defectos que todas las precedentes. Y no es que los datos estén mejorando.

La web de análisis feminista Feminist Frecuency ha estudiado todos los títulos presentados en la última E3, la feria del sector más importante del mundo. Según su estadística, de todos los juegos editados en 2019, menos del 6% están protagonizados por mujeres

Es sin duda un muy mal dato, sobre todo si se tiene en cuenta que significa un descenso respecto al 8% del pasado año. Pero más grave es la tendencia. Este análisis que se mantiene desde 2015 nunca ha arrojado una cifra por encima del 9%. 


Más juegos mixtos

En total se analizó el contenido de 126 juegos de las principales productoras. Microsoft, Nintendo, Bethesda, Ubisoft o EA parecen seguir de espaldas a la corriente igualitaria que recorre el mundo. De todos los juegos que se vieron, solo 6 están centrados en protagonistas exclusivamente femeninas. Por el contrario, 28 de ellos cuentan con protagonistas masculinos

El único dato que puede resultar algo halagüeño es que ha ascendido el número de juegos en los que el usuario puede elegir personajes tanto masculinos como femeninos, como por ejemplo el megapopular Fortnite. 

Sin embargo, las gamers están pidiendo que esta cuota de juegos con heroínas femeninas ascienda. Consideran que sería un buen método de reducir el machismo que también impera en este entorno.