Treinta y dos compañías de la industria de la moda y el textil, algunas de bajo coste (Inditex, H&M, Adidas y Kering) y otras de lujo (como Kering, Gucci o Yves Saint Laurent) han suscrito un acuerdo con el que persiguen reducir su impacto en el medio ambiente.

Conscientes del impacto que su producción tiene en la naturaleza, a pesar del peso económico de su industria (genera 1,5 billones de euros anualmente), las compañías han creado el 'Pacto de Moda', que se presentará en el Palacio del Elíseo ante el presidente francés, Emmanuel Macron, y en el marco de la cumbre del G7 de Biarritz. Un portavoz de World Wildlife Fund (WWF), Pierre Cannet, indicó en rueda de prensa gala que, ante la multiplicación del consumo de prendas en las últimas décadas, apostar por energías sostenibles no será suficiente, puesto que la idea de las empresas sigue siendo vender cada vez más.

El acuerdo establece varias fases de acción. Para empezar, adecuarse a las convenciones internacionales para mitigar la contaminación y limitar el calentamiento global, invertir la curva de pérdida de la biodiversidad y combatir la contaminación de los océanos, reduciendo las microfibras de materiales sintéticos y promoviendo una producción que no arroje productos químicos a ríos y océanos.

Además, se intentará utilizar energías 100% renovables de aquí a 2030, se trabajará por eliminar el plástico de uso único en el mismo periodo y se buscará crear áreas de colaboración entre las marcas para concretar nuevas iniciativas en equipo.