Un bolsa que parece de plástico y se deshace en agua
Llevamos años en guerra contra las bolsas de plástico, fabricadas con petróleo, por su elevado rango contamienante: poniéndoles precio para disuadir de su uso, propagando campañas sobre su excesivo número en todo el mundo o directamente prohibiéndolas en países como Irlanda, Escocia o Taiwan.Un nuevo paso más en esta lucha lo ha dado Avani Eco Bags presentándonos unas bolsas que, por su apariencia, parecen de plástico, pero que en realidad están fabricadas con fibras vegetales de yuca y resina natural. Y además, son biodegradables, no son tóxicas y sirven como abono en pocos meses, sin dejar residuos, aunque si las ponemos en agua caliente a unos 80 ºC de temperatura, aceleraremos el proceso, y nos podremos deshacer de ellas rápidamente, porque son devoradas por microorganismos, sin dejar residuos, o convertidas en CO2 y agua en cuestión de meses.Su fabricante asegura, en contra de lo que se pueda pensa, tienen la misma capacidad que una bolsa de plástico, resisten prácticamente lo mismo y tienen el mismo volumen.No es la primera vez que la empresa Avani plantea una propuesta de estas características: es una empresa social basada en Bali, Indonesia, uno de los centros neurálgicos de la batalla contra los residuos de plástico. https://www.youtube.com/watch?v=eM20C1lJxnI