El gobierno francés planea prohibir por decreto la publicidad luminosa en horario de madrugada (entre la una y las seis de la mañana), así como la climatización de comercios u oficinas que tengan las puertas abiertas. Los locales que no apaguen sus luminosos se expondrán a multas de hasta 1.500 euros, y los que no cierren sus puertas, a multas de hasta 750 euros.

Las iniciativas son parte de un plan para reducir el consumo de energía que no sea imprescindible, y en este sentido, la ministra francesa de Transición Ecológica, Agnes Pannier-Runacher, ha destacado en una entrevista en el Journal Du Dimanche que dejar las puertas abiertas con el aire acondicionado o la calefacción encedida "aumenta el consumo un 20 %".

Actuaciones sobre Estado y grande empresas

La ministra ha añadido que “los franceses están conmocionados por ciertas prácticas”, refiriéndose al plan de “sobriedad energética” que anunció el presidente Emmanuel Macron el 14 de julio, y que tiene como objetivo reducir el consumo de electricidad en un 10% para 2024. Para Pannier-Runacher, también se debe actuar sobre “el Estado y las grandes empresas, porque los franceses no pueden aceptar legítimamente que se les pida que hagan un esfuerzo si los grandes no lo hacen”. De ahí la necesidad de “trabajar también con los interlocutores sociales, tiendas abiertas al público, centros comerciales y grandes superficies, pero también con el turismo, la construcción residencial y las comunidades locales”.

Fomentar el teletrabajo

Entre las hipótesis "sobre la mesa" también está la posibilidad de incrementar el uso de 'smart working' para reducir el consumo de combustible. “Espero que las empresas y organizaciones profesionales hagan recomendaciones en función de cada situación, porque no hay una solución única”, subrayó la ministra.

Consultada sobre la propuesta que ha planteado la Agencia Internacional de la Energía para reducir la velocidad del tráfico en las autopistas en 10 km/h, Pannier-Runacher animó a las empresas a “tomar una posición sobre este tema, por ejemplo en el contexto de los viajes de negocios”. “Si sus empleados conducen más despacio en la autopista, ahorran combustible”, concluyó.