En los hogares españoles se tiraron, a lo largo de 2021, 1.245 millones de kilos/litros de alimentos. La cifra representa un 8,6% menos que el año anterior. Son datos que ha aportado el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, a partir del Informe del Desperdicio Alimentario de España 2021. La media se sitúa en 28,21 kilos/litros de desperdicio alimentario por persona, lo que supone la cifra más baja de los últimos cinco años y 2,72 kilos/litros menos que 2020. De acuerdo con el análisis del ministro, este descenso se podría atribuir a un cambio de hábitos tras las restricciones que se produjeron en 2020 por la pandemia.

En 2021 aumentó un 10,4% el consumo de alimentos fuera del hogar

Con el final del confinamiento, se habría cocinado menos en casa y, de hecho, en 2021 descendió el volumen de alimentos comprados para consumir en el hogar en un 7,2%, mientras que el consumo de alimentos fuera del hogar creció en un 10,4%. Esto conlleva, además, una reducción del desperdicio de sobras de recetas y productos cocinados que, según el informe, en 2020 significaron el 23,8% de los alimentos tirados a la basura en el hogar, y en 2021 han pasado a representar el 18,9%. Por el contrario, el desperdicio de alimentos comprados ha crecido casi 5 puntos, al pasar del 76,2% al 81,1%.

Además, el ministerio destaca que en 2021 descendieron de forma significativa las sobras de platos cocinados de pescado (50,4% menos que en 2020), carnes (42,6%) y arroz y pastas (35%).

Los productos comprados que más se desperdiciaron en los hogares en 2021 fueron carnes congeladas (16,7% del total), salsas (15,9%), café e infusiones (12,2%), legumbres (12%) y sopas, cremas y caldos (10%).

Y no solo entra en juego el cambio de hábitos, el ministerio también apunta al encarecimiento de los alimentos por la subida de precios de las materias primas y costes de producción, como origen del menor desperdicio.