Cuando hablamos de mujeres científicas, nos referimos a las especialidades conocidas como STEM, es decir Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas. Y aunque han demostrado de sobra su capacidad para dedicarse a ello, los etereotipos masculinos parece estar frenando sus aspiraciones.  

¿Otra trabajo de hombres?

Estas áreas de la Ciencia están dominados tradicionalmente, como tantos trabajos, por los hombres. Y es bien sabido que las estudiantes siguen estando insuficientemente representadas en este tipo de programas en la actualidad. Esta brecha de género es ampliamente debatida y se trabaja para comprender el fenómeno y cambiarlo. En un estudio de la Universität der Bundeswehr München participaron 296 mujeres de diferentes universidades alemanas, todas inscritas en un programa STEM con menos del 30 por ciento de estudiantes de sexo femenino. Su objetivo era investigar el impacto de los estereotipos y el papel de la familia, la escuela y la sociedad en el autoconcepto de las estudiantes que ya están estudiando estos temas científicos.  

Los estereotipos y la autoconfianza

Querían demostrar que los estereotipos afectan la autoevaluación de una persona y reducen su sentido de competencia, la capacidad y la confianza en sí mismo, es decir, el concepto de sí mismo.
El estudio señaló el hecho de que la familia puede tener un impacto negativo sobre el autoconcepto y que las iniciativas que buscan directamente apoyar a las estudiantes, en realidad puede ser contraproducente y reforzar las visiones estereotipadas.
Según los autores, el apoyo indirecto ha demostrado ser más eficaz. Esto implica, por ejemplo, dar a las niñas la oportunidad de tener experiencias positivas en temas relacionados con la ciencia o que tenga la oportunidad de conocer modelos de conducta que son entusiastas acerca de sus profesiones STEM. Tales medidas pueden aumentar el autoconcepto de las estudiantes en los programas STEM, más que el estímulo directo.   Y como siempre, aquí el estudio completo.