La tecnología sabe más que nosotros. Sabe incluso cosas que nosotros no sabemos que sabemos. Afortunadamente, y de momento, está domesticada y podemos usarla en beneficio propio.

Es el caso del algoritmo de inteligencia artificial llamado “Word2vec”. Una secuencia informática que se ha demostrado muy hábil para desentrañar ese conocimiento que los humanos somos capaces de recabar, pero no nos damos cuenta

Un grupo de científicos de la universidad de Berkeley tuvo la brillante idea de recabar unos cuantos miles de artículos científicos y técnicos sobre comportamiento y resistencia de materiales. Nada menos que 3,3 millones de abstracts de publicaciones científicas sobre el asunto. 

Word2vec se puso a trabajar en ellos. En principio como un estudiante cualquiera. En el rato que estuvo funcionando fue capaz de aprender conceptos como la tabla periódica y, de ahí, el comportamiento de muchos materiales. Pero no se paró ahí.
 

 

Descubrió nuevos materiales
 

El algoritmo siguió trabajando y aplicando su inteligencia sintética. Y solo con la información de los estudios, ha sido capaz de extraer conclusiones que no figuraban en ninguno de los trabajos científicos que analizó. Incluso descubrió nuevos materiales conductores de la electricidad mucho antes que los propios científicos e indicarles el camino para diseñar nuevos materiales. 

Los investigadores encargados del proyecto están realmente contentos con los resultados y sus implicaciones. La “minería de texto” como lo han definido los expertos, vaticina una nueva era en la expansión del conocimiento humano. 

Si ha sido capaz de extraer nuevos materiales y técnicas solo sobre el campo de los materiales, es fácil deducir qué podrá hacer con los millones de informes que existen sobre todos los campos del saber.