El pasado 3 de febrero, la Fiscalía de Nanterre (Francia) anunció que acusaba al futbolista marroquí del Paris Saint Germain, Achraf Hakimi, de haber violado a una joven de 24 años en su domicilio de París. Cabe destacar que la víctima ofreció su testimonio a las autoridades en una comisaría y, aunque confesó que había sido violada por el futbolista, no quiso interponer denuncia.

Tal y como se ha podido saber, el pasado 25 de febrero, Hakimi y la víctima se citaron tras llevar hablando por Instagram desde el 16 de enero y fue en la casa del futbolista donde la besó y realizó tocamientos sin su consetimiento. Tras esta desagradable situación, la joven avisó a un amigo y pudo escapar del presunto agresor. Tras lo expresado por la Fiscalía, Achraf tiene vigilancia policial y le está prohibido contactar con la víctima.

La abogada del futbolista marroquí, Fanny Colin, ha hablado con los medios de comunicación y ha asegurado que su defendido está "sereno" y "tranquilo" y que "las acusaciones son falsas". En este sentido ha querido dejar claro que Achraf está a disposición de la Justicia. Su club, el Paris Saint Germain, también ha mostrado su apoyo incondicional al lateral.

La barbaridad de Alfonso Ussía

En este tipo de casos, no es raro escuchar testimonios machistas de hombres de culpan a la víctima de la violación. Como si el hecho de ir a casa de un hombre signifique, sí o sí, que la mujer ha de mantener relaciones sexuales con él. En una línea similar se ha posicionado el periodista Alfonso Ussía, quien ha lanzado la siguiente pregunta en su cuenta personal de Twitter: "¿Y para qué fue la chica a su casa?".

Con esta frase, lo que hace Ussía es justificar algo tan grave como una violación. Decir que es normal que te violen porque has entrado en una casa voluntariamente. Pero eso es completamente irrelevante. Solo podría ser justificado por un desalmado y es lo que la mayoría de personas que han leído el repugnante comentario han sentido.

"Pudo ir a conocerle, a coquetear o a tomar una copa y ver qué surgía. Pero es que aunque hubiese ido a follárselo contra la pared, ella tiene todo el derecho del mundo a cambiar de opinión, y Hakimi ningún derecho a meterle mano en el momento en que ella indique que no lo desea", ha expresado un tuitero. "¿A usted lo violan cada vez que va de visita a una casa? Denuncie también Don Alfonso, eso no es normal", ha señalado otro. "Es indiferente. Y es triste que en pleno siglo XXI haya que seguir explicando que te vayas a una casa, a un coche o adónde sea con un chico, un "no" es un "no" y punto. Por lo demás, imagino que si usted tiene alguna amiga no creo que se atreva a poner un pie sola en su casa", ha detallado otra internauta. 

Hiba Abouk ya tramita su divorcio

La actriz Hiba Abouk, todavía mujer de Hakimi, no ha dudado ni un momento qué hacer tras conocer los hechos acontecidos y ha anunciado que está tramitando su divorcio del futbolista. Asimismo, ha borrado de su Instragram numerosas fotos junto al marroquí. 

El entorno de Abouk ha podido confirmar el delicado momento en el que se encuentra la actriz y asegura que está "ante el mayor drama de su vida, completamente destrozada”. Cayetana Guillém Cuervo, amiga de Habouk, también ha reflexionado sobre el momento que debe estar viviendo: "Sea verdad o mentira lo de Achraf Hakimi lo debe estar pasando muy mal.Yo no tengo idea de nada, pero solo tener eso encima, es una cosa delicada. Lo siento porque la quiero un montón, es una tía estupenda y no debe estar pasándolo bien nadie. Lo que sea lo dirá la Justicia", ha reflejado.

Un momento difícil para la actriz de El Príncipe, quien comenzó en 2018 su relación con Hakimi, con el que ha tenido dos hijos: Amín, de tres años, y Naím, de uno. De hecho, durante este mal momento, Abouk se encontraba de vacaciones en Dubai junto a sus hijos. En redes sociales guarda un silencio sepulcral y se espera que con el paso del los días, emita un comunicado donde anuncie que se separa de Achraf. El matrimonio no se encontraba en su mejor momento, y lo hecho por el futbolista ha adelantado los acontecimientos.