Ya casi está aquí. Ya está a punto de llegar el día. El the end de una de las plataformas sociales que más expectativas había generado cuando se creó, allá por el mes de junio de 2011.
Esa repercusión inicial, unida a las perspectivas a medio plazo, llevaron incluso a pensar que nos encontrábamos ante una red social que podía hacer frente a las triunfadoras entonces –y que vienen a ser casi las mismas de ahora-.
A esto contribuía, sin duda alguna, el hecho de que detrás se encontraba el gigante de la tecnología por excelencia, de cuyos desarrollos, innovaciones y novedades se iba a beneficiar, sí o sí, su plataforma social.
Las cifras, además, no le quitan la razón puesto que ha llegado a acumular cerca de 350 millones de usuarios en todo el mundo, un dato nada desdeñable que la situó como tercera red social.
Sin embargo, este tipo de aplicaciones/herramientas requieren algo más que usuarios para triunfar. Sobre todo precisan que sean activos, y este es un factor que Google + no ha logrado del todo.
La excusa perfecta
Hace unos meses la compañía matriz informó de la detección de ciertos fallos de seguridad, un anuncio que muchos vieron como la excusa o argumento perfecto para enviar la plataforma al baúl de los recuerdos.
Y así fue. Bajo el paraguas de esas vulnerabilidades, en octubre de 2018, tras reconocer un fallo de seguridad se adelantó que Google + cerraría sus puertas en agosto de este año. El anuncio, no obstante, tuvo su segunda parte en diciembre, cuando se informó de que no sería en agosto sino antes, en abril.
Si eres usuario de la red social de Google habrás recibido un mail estos días en el que se fija ya la fecha definitiva para el cierre establecido para el 2 de abril.
En dicho correo electrónico se advierte en el asunto: “Has recibido este correo porque tienes una cuenta personal de Google+ o gestionas una página de este servicio”.
A partir de aquí, en un texto que, a diferencia de lo que suele suceder en las comunicaciones que realizan compañías tecnológicas, se caracteriza por su extensión, la empresa explica los motivos que llevan a la clausura de la plataforma.
"Uso decreciente"
Entre ellos, además del citado de la seguridad, reconoce un “uso decreciente” y las “dificultades que supone mantener el producto para que satisfaga las expectativas de los usuarios”. La fecha límite es el 2 de abril, de ahí que si tienes cuenta en Google+ lo mejor es que descargues los contenidos que tienes en la plataforma para no perderlos, por ejemplo, fotos y vídeos.
En el mismo artículo, la compañía te explica cómo puedes salvaguardarlos, al tiempo que aclara que “el proceso de eliminación del contenido de las cuentas y las páginas”, así como el archivo de álbumes de usuarios particulares “llevará algunos meses y, hasta entonces, puede que el contenido esté disponible”.
Curiosa la advertencia que hacen y que no tiene mucho sentido: “A partir del 4 de febrero, ya no podrás crear nuevos perfiles, páginas, comunidades ni eventos de Google+”. Pero, ¿quién querría hacerse un perfil en una red social a punto de desaparecer?.
Lo mejor es que, si hasta ahora has sido de la que se suponía que podía ser un ‘boom’ en el superpoblado mundo de las redes sociales, tomes nota de las recomendaciones que te hacen para salvar los contenidos que has acumulado. Avisado estás.
