Jaime de Wenetz, director general de ViaBill España, tiene uno de esos curriculum vitae que dan envidia a cualquiera. Es licenciado en Administración y Dirección de Empresas, ha trabajado en banca de inversión en Londres y también ha vivido en Suiza. Es un experto en finanzas y en tecnología. Pero, sobre todo, es un emprendedor, “desde los seis años”, dice.

Sus proyectos han ido desde una granja de faisanes, hasta montar tres empresas, de las cuales vendió dos. “Me encanta España e hice lo posible por volver”, explica. Desde 2010, su mundo es la tecnología.

Ahora es el máximo responsable del desembarco en España de ViaBill, una compañía danesa que está presente también en Noruega y Estados Unidos y que ofrece la posibilidad de realizar compras on line fraccionadas en cuatro pagos.

ViaBill ofrece la posibilidad de realizar compras on line fraccionadas en cuatro pagos

ViaBill ofrece la posibilidad de realizar compras on line fraccionadas en cuatro pagos 

Me incorporé cuatro días antes de que comenzase el estado de alarma

Sois una startup y no. ¿Tenéis libertad de movimientos?
La compañía nació en 2014, cuando financiar online no estaba tan establecido. ViaBill fue una de las primeras.

La matriz tiene un playbook, pero en cada país puede haber adaptaciones. De hecho, los resultados están siendo tan buenos, que está siendo bastante flexible en cuanto a las decisiones locales.

En España estamos centrados en comercialización y nuevo negocio. Toda la tecnología sigue estando en Dinamarca. Por tanto, el control no lo pierden.

Todo el comercio de calle ha invertido mucho en sobrevivir a partir del negocio online

¿Cómo ha sido la llegada a España?
Hemos salido en un momento muy peculiar. Yo me incorporé cuatro días antes de que comenzase el estado de alarma. A principios de marzo. La situación era de expectación, a ver qué pasaba y cómo iba evolucionando.

Todo el comercio de calle, offline, ha invertido mucho en sobrevivir a partir del negocio online. Esto hace que nos encontrásemos con la oportunidad de aprovecharlo, tanto es así, que los números han sido mejores de lo previsto.

La idea es gestionar otros países con talento nativo, pero en España

¿Por qué se eligió el nuestro como cuarto país?
España tiene algunas características interesantes. A nivel consumo crediticio es uno de los países con mayor uso de herramientas de este tipo y de los que menos regulado está; y, por tanto, es más fácil entrar. En eso coincide con Italia y Francia. Pero la diferencia con ellos es que a nivel de talento y coste. La idea es gestionar esos países con talento nativo, pero en España.

Hay mucha competencia; quizá seamos los sextos en llegar, pero lo hemos hecho en un año en el que el e-commerce ha crecido un 36 por ciento, España es el tercer país del mundo que más ha crecido en e-commerce después de Singapur y Argentina. La previsión en enero de 2020 era crecer un 12,5: la hemos triplicado.

El comercio online va a bajar por cuota, pero no volumen

¿Cómo ves el futuro próximo?
En 2021, si las cosas a nivel de vacuna van funcionando, vamos a ver que la tienda física recupera cuota, es lo más normal. El online va a bajar por cuota, pero no volumen.

Hay estudios que dicen que solamente un 2 por ciento de la población española no ha comprado online durante el confinamiento. De repente tienes un montón de gente que nunca había comprado online y ahora lo ha hecho. Ese miedo a la compra online que había en 2019, ya no lo hay.

Nosotros, si no hacemos las cosas mal, deberíamos crecer, porque somos jóvenes todavía. El pago financiado online en España supone menos de un 1 por ciento del total. Es verdad que es un mercado muy competitivo, pero el margen de crecimiento es total. Y cada vez más, todo el mundo quiere vender online.

¿Qué ventajas tiene vuestra propuesta para quienes quieren hacerlo?
De cara al comercio que lo ofrece, tiene la ventaja de que va a incrementar ventas porque el cliente ve el valor dividido en cuatro e incluso puede no solo aumentar la conversión, sino también el ticket medio: a lo mejor te ibas a comprar una camisa, pero te compras dos. El comercio recibe el dinero en el acto, igual que una pasarela de pago y nosotros asumimos el riesgo de impago.

Es decir, consigues mayor conversión, que es la métrica principal de cualquier comercio online.

¿Cómo es la competencia con los bancos?
Los bancos tradicionales son muy lentos, lo estamos viendo todos los días. Eso hace que surjan compañías tecnológicas que solucionan problemas nicho y en eso son muy buenas. El banco te da un portfolio de productos infinito, pero no saben hacer bien todo, nadie puede.

El problema de los bancos es cómo crecer y moverse rápido. Si en algún momento se plantean comprar algo, es una compañía que les soluciona un problema. No otro banco. Quieren una empresa que les ahorre un año y medio de desarrollo tecnológico.

¿Cómo se consigue un curriculum como el tuyo?
Es una cuestión de trabajo, de tener algo de olfato para saber qué pasos quieres dar y nunca quedar mal, porque tu nombre es el mayor activo que tienes a nivel laboral.