La población española parece ser la más concienciada con la recuperación del vidrio. Será eso o que lo tenemos más cómodo [disponemos de un contenedor por cada 202 habitantes], pero el caso es que ningún otro país europeo tiene una tasa de reciclado mayor que la nuestra: un 76,8 por ciento, según datos de Ecovidrio.

Nuestro compañero Borja García ha preparado una de sus infografías con todos los datos, para que los tengas a la vista.

Info reciclaje ElPlural 01

La ciudadanía ha demostrado su compromiso con el medioambiente en plena crisis sanitaria

Año diferente

“En un año marcado por la Covid-19, en nuestro país se recogieron a través del contenedor verde un total de 843.049 toneladas de residuos de envases de vidrio, lo que sitúa la aportación de cada ciudadano en 17,8 kg (unos 61 envases por persona)”, destaca la entidad sin ánimo de lucro encargada de la gestión del reciclado de residuos de envases de vidrio en nuestro país.

Un dato que considera “muy positivo, ya que refleja el compromiso de los ciudadanos con el medioambiente y con el reciclaje incluso en un momento de gran incertidumbre y crisis sanitaria”.

Con los residuos que se recuperaron, España evitó la emisión de CO2 equivalente a dar 133 veces la vuelta al mundo en avión por el ecuador. “Así, España consolida la tendencia positiva y ascendente en términos de reciclaje de la última década”, destaca Ecovidrio.

Balearles, líder

Por comunidades, Baleares se sitúa al frente con 28 kilos por habitante (Kg/hab). La siguen el País Vasco (26,3 Kg/hab), La Rioja (24 Kg/hab), Navarra (23,8 Kg/hab) y Cataluña (22,1 Kg/hab).

Y no solo eso: según datos oficiales emitidos por el MITERD (2018), la tasa de reciclaje en España se sitúa por encima de la media de la Unión Europea (75,8 por ciento) y a países del entorno como Portugal (61,1 por ciento), Reino Unido (68,5 por ciento), Italia (73,4 por ciento) y Francia (76,2 por ciento)”.

Como no podía ser de otra forma, la pandemia también ha tenido un impacto en el volumen total de vidrio recogido en los contenedores, que ha registrado un descenso del 6 por ciento “debido a los cierres y restricciones del turismo en general y del sector HORECA en particular”.

Depositar el vidrio en el contenedor es un hábito consolidado

Un ejercicio positivo

José Manuel Núñez-Lagos, Director General de Ecovidrio, asegura que “el año 2020 ha sido un ejercicio especialmente positivo en lo relativo al compromiso con el medioambiente”; y añade que nuestras visitas al contenedor son “un hábito muy consolidado entre la población”.

Núñez-Lagos considera que “abordar la emergencia climática y la transición hacia una economía circular real para la protección de nuestros ecosistemas y biodiversidad es ahora mismo una prioridad”.

En 2019 se reciclaron cerca de 1,5 millones de toneladas de envases domésticos

Más reciclaje

Pero no es lo único que llevamos al contenedor. En 2019 se reciclaron cerca de 1,5 millones de toneladas de envases domésticos de plástico, brik, metal y papel o cartón. Según Ecoembes, “Este hábito de separar nuestros residuos para reciclarlos después no ha parado de crecer en los últimos años y ya es la acción medioambiental más extendida en nuestro país”.

En el contenedor amarillo depositamos más de 17 kilos por habitante en 2019 y en el azul, 19,4.

Errores comunes

Desde esta última entidad, nos advierten de los errores más comunes a la hora de separar los residuos. Por ejemplo, en el contenedor amarillo no se deben depositar juguetes de plástico, ni biberones o chupetes, utensilios de cocina ni cubos de plástico, como los de la playa.

En el azul, uno de los errores más comunes es tirar los briks. Pero este tipo de envase -nos recuerdan- está compuesto por cartón, plástico y aluminio, así que su sitio es el amarillo. Por otro lado, las servilletas de cocina y los papeles sucios van al de deshechos orgánicos. Y los pañales, al gris.

En el contenedor verde no se deben tirar bombillas, espejos, ceniceros, vasos o vajillas: van al punto limpio.