Para un amante de la bici como yo, el 3 de junio es una jornada muy especial: el día mundial de la Bicicleta. Un medio de transporte que está ganando terreno en muchas ciudades del mundo.
La bici te aporta salud, sostenibilidad y ahorros en tus traslados
¿Por qué es tan buena opción la bici? Porque no solo es beneficiosa para ti, también para el planeta. Salud y sostenibilidad en una misma solución. ¡Ah! y no te olvides del ahorro que supone también: ni tienes que sacar el coche ni que gastar electricidad en cargar el patinete.
Ve siempre pendiente de todo el mundo: lo más probable es que nadie te oiga y poca gente te vea
La bici, con seguridad
Quienes andamos en bici por las ciudades, sabemos que la seguridad es uno de los puntos clave. Mi primer consejo es que vayas siempre pendiente de todo el mundo. Lo más probable es que nadie te oiga y poca gente te vea. Así que, usa ropa que sea un poco “cantosa”, aunque luego la guardes en la mochila. Además, pon todas las luces que puedas y llévalas siempre encendidas.
Por supuesto, yo siempre llevo casco y guantes; y mangas largas y pantalón largo. Ya me he caído unas cuantas veces en asfalto y, aunque parezca que vas muy despacio, te destrozas. Es verdad que no llevo protecciones en rodillas ni codos, pero te recomiendo que te las pongas, sobre todo si no tienes mucha experiencia en ciudad.
Tampoco llevo calapiés. Llevo pedales normales, para poder apoyar en el suelo sin problema en todo momento y que no se me queden enganchados. Es verdad que es más incómodo, pero para mí es más seguro.
Copenhague, el ejemplo
Cada vez hay más ciudades que están intentando mejorar sus infraestructuras para la bicicleta. El caso más relevante es el de Copenhague, que se ha convertido probablemente en el ejemplo para todas las demás.
El centro de la capital danesa tiene más bicis que coches. Y no solo eso, cuenta con sus famosas Supercykelstier o superciclovías. Son una red de “carriles bici” que permiten a los ciclistas moverse a distancias de hasta 20 kilómetros, de forma cómoda y segura.
Cuentan con carriles anchos y, sobre todo, el pavimento es de gran calidad [no como los que nos encontramos a veces aquí, en España]. Además, los ciclistas tienen prioridad en los cruces y están bien iluminados, incluso en zonas rurales.
Se calcula que el uso de la bici se incrementa entre el 10% y el 20% en zonas cercanas a estas autovías ciclistas, lo que ha reducido el tráfico y ha mejorado la calidad de vida de muchas personas.
Ámsterdam, de toda la vida
Por supuesto, entre las ciudades que asociamos de forma casi inconsciente a este medio de transporte, se encuentra Ámsterdam. Allí, entre el 35% y el 40% de los desplazamientos se realizan pedaleando.
La capital de los Países Bajos cuenta con infraestructuras de todo tipo para los ciclistas. Además, las políticas urbanas se centran en reducir el tráfico de vehículos a motor.
Utrecht, a la sombra de Ámsterdam
Pero hay otra ciudad en los Países Bajos que merece la pena mencionar, a pesar de estar siempre un poco a la sombra de Ámsterdam. Es Utrecht, que cuenta con la estación para bicicletas más grande del mundo, con más de 12.500 espacios.
También se han construido carriles y vías anchas y separadas del tráfico, para garantizar la seguridad de quienes optan por dar pedales, que son prioritarios en la planificación urbanística de la ciudad.
Malmö, prestadas
Malmö, en Suecia, es otra de las referencias a la hora de hablar de ciudades amigables para la bici. Se calcula que casi 1 de cada 3 desplazamientos se realizan a pedales.
En total, cuenta con más de 500 kilómetros de infraestructura ciclista, con vías protegidas y rutas prioritarias. También tiene carriles separados del tráfico, puentes y túneles solo para bicis, estacionamientos inteligentes y todo tipo de medidas de seguridad. Vamos, una maravilla.
Bogotá, la joya americana
En América, la corona se la llevaba Bogotá. La capital colombiana cuenta con más de 600 kilómetros de vías para bicicletas, la cifra más alta de América Latina, y el domingo se cierran más, para que solo puedan ser usando por ellas [y peatones].
Se calcula que se realizan más de 900.000 desplazamientos a pedales al día. Y no es de extrañar, porque llevan décadas fomentando el uso de la bici: ya en 1974 se instauraron los cierres de calles los domingos. En la actualidad, se cierran más de 120 kilómetros de vías y participan 1,5 millones de personas cada semana.
Durante la pandemia, se reforzó el papel de las bicis, con carriles y vías de emergencia que al final se han convertido en permanentes. Además, se han lanzado programas de subsidios y créditos blandos para adquirirlas y se ha reforzado la inversión en infraestructura.
