Estamos a poco menos de medio año del comienzo de la COP26, la conferencia sobre el cambio climático promovida por la ONU cuya última edición tuvo lugar en Madrid y de la que estuvimos informándote en El Telescopio en tiempo real.

No sabemos si la conclusión será que hemos avanzado mucho o poco, pero lo que el presidente de este encuentro, Alok Sharma, ha asegurado ayer mismo que nos falta mucho camino que recorrer para alcanzar los objetivos marcados por la comunidad científica y acordadas por los gobiernos de los países participantes.

El Secretario General de Naciones Unidas, Antònio Guterres, con el Primer Ministro británico, Boris Johnson
El Secretario General de Naciones Unidas, Antònio Guterres, con el Primer Ministro británico, Boris Johnson

La COP26 es la última buena oportunidad que tenemos para ponernos serios y realistas

Emergencia climática

“Los océanos se están calentando, las tormentas se intensifican y todavía estamos muy lejos de alcanzar las metas de los acuerdos de París” sobre el cambio climático, explicó.

El político británico realizó esa afirmación durante una conversación sobre la transición “verde” en sectores como el de la energía, el del transporte y el de la alimentación, dentro de los Encuentros de primavera del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional [FMI].

Por supuesto, no fue el único de los participantes en mostrar su preocupación. John Kerry, enviado especial presidencial de Estados Unidos para el Clima, aseguró que la COP26 es “la última buena oportunidad que tenemos para ponernos serios y realistas”.

En su intervención, el político norteamericano hizo un llamamiento a la reducción de emisiones en los países desarrollados: “Es esencial que incrementemos nuestra ambición; Glasgow es el siguiente paso para definir no lo que queremos hacer, sino lo que realmente necesitamos hacer para conseguir hacer el trabajo”.

No podemos erradicar la pobreza o adaptarnos al cambio climático sin invertir en la naturaleza

Oportunidad

La COP26 es una gran oportunidad para la lucha climática. Así lo expresó el príncipe Guillermo, que exhortó a los bancos a dirigir su mirada -y su dinero- hacia la naturaleza, tras destacar que hasta la fecha prácticamente no lo han hecho.

“No podemos recuperarnos de forma sostenible del coronavirus, erradicar la pobreza del planeta, conseguir cero emisiones o adaptarnos al cambio climático sin invertir en la naturaleza”, afirmó.

Damilola Ogunbiyi, máxima responsible de Sustainable Energy for All (SEforALL), una entidad asociada a Naciones Unidas, puso el acento en el acceso a la energía como parte de la transición verde. Según sus cifras, cerca de 800 millones de personas en el mundo no tienen acceso a la electricidad y 2.800 millones carecen de acceso a formas limpias de cocinar. Una cifra que equivale a la suma de las poblaciones de África, Europa y China.

Para mejorar las vidas de esos seres humanos, Ogunbiyi recomienda que los gobiernos se centren en políticas de promoción de las energías renovables y sostenibles y que se enfoquen menos en el negocio y la regulación.

“Todos vemos que, globalmente, cuando nos juntamos, podemos hacer cosas increíbles y la vacuna contra el Covid es un ejemplo perfecto”, explicó. “Tenemos literalmente que tener una respuesta […] que ayude a los países en desarrollo, porque no es que no quieran hacer la transición o que no quieran hacer lo correcto. Es un hecho que, si quieres llevar a cabo la transición, necesitas una gran financiación”.

Ese acceso a fondos sigue siendo uno de los caballos de batalla. El pasado 31 de marzo se celebró una reunión previa con ministros de 35 países y una docena de bancos de desarrollo, incluido el FMI en la que los participantes expresaron el reto que supone, en especial en lo relativo a la transparencia de los flujos financieros y la importancia de armonizar los requerimientos entre los proveedores de financiación.

La COP26, que se celebrará en Glasgow en noviembre, es un momento clave en la lucha contra el calentamiento global. “La emergencia climática está de lleno sobre nosotros y no tenemos tiempo que perder”, afirmó el Secretario General de Naciones Unidas, Antònio Guterres, tras un encuentro inicial con el Primer Ministro británico, Boris Johnson, el pasado mes de septiembre. “La respuesta a nuestra crisis existencial es llevar a cabo una acción rápida, decisiva y escalada, además de la solidaridad entre las naciones”, añadió.