Hay personajes que flotan por su propia condición. Iván Redondo, analista político (public affairs firm, que así califican él y su empresa pomposamente su desempeño) es un ejemplo estelar. Después de lograr que José Antonio Monago tan sólo ejerciera una legislatura como presidente de la Junta de Extremadura, se ha hecho un hueco en el mundo de la fama como tertuliano. Especialmente, como gran analista en Espejo Público el programa que ocupa las mañanas de Antena 3 y que presenta Susanna Griso.

Pomposo en varias lenguas

Verle mañana tras mañana impartir lecciones de política a los líderes en campaña desde lo que él califica (de nuevo pomposamente y en inglés, of course) como TheWarRoom resulta casi humorístico. Y, sobre todo, da ocasión para recordar sus ‘grandes momentos’ a la vera de quien fue su muñeco en la política, el expresidente extremeño.

Pero primero una breve introducción biográfica para quienes no conozcan al personaje. Iván Redondo, donostiarra y cuarentón, es cabeza de Redondo & Asociados, Public Affairs Firm (sí, así). Prueba de las ínfulas del personaje, su página web viene ilustrada por una imagen del Congreso de los Diputados… ¡y otra del Capitolio de Washington!, más un doble lema, ocurrencias que aparecen firmadas con gráfico animado: “El Mensaje ya está en la gente. Sólo hay que conectar con él”, y otro que quizás aún describa mejor al pensador que hay tras Redondo: “La Política es el arte de lo que no se ve”.

Eso sí, esconder su ego para cumplir con esta sentencia le ha resultado imposible. Así, cuando desembarcó en Extremadura después de medrar siempre a la orilla del PP (se hizo hueco junto a Antonio Basagoiti), dada su prepotencia, en seguida le vieron sobresalir por detrás de Monago, lo que les llevo a calificarle primero como ‘el octavo Consejero’ (por su poder a la hora de las decisiones y los nombramientos que tomaba el muñeco), y después, gracias al ingenio de los redactores de Extremadura Progresista, como ‘el octavo Pasajero’ (en honor a la película Alien y lo que el monstruo hacía con los pasajeros de la Nostromo.., básicamente, devorarlos). 

TheWarRoom pare las monagadas

Pero, una vez presentado, vayamos a las ocurrencias de TheWarRoom (en Extremadura puso este nombre en la sala de prensa de la Presidencia); ocurrencias que ahora imparte desde Antena3, como decimos.

Empecemos por concederle la autoría de lo que en la Comunidad Autónoma extremeña muy pronto se conocieron como ‘monagadas’. Frases ‘redondas’ que José Antonio Monago colocaba, lo mejor que podía, en sus discursos y apariciones públicas, y por las que se hizo famoso en la Comunidad. Hay que resumir en favor de la brevedad, pero hay muchas más de las que siguen.

La primera que trascendió la pronunció Monago aun siendo candidato, pero ya bajo la sombra de Redondo: “si gano donaré mis zapatillas a las Hijas de la Caridad para que las subasten, por el carácter simbólico que tendrán del mucho esfuerzo”. Después llegaron perlas como éstas: “Sólo se miente más que en la caza, en periodo electoral", pronunciada en una feria de la caza en Badajoz; "Saldremos adelante no con ruido de tambores, sino con ruido de tractores"… Y una que pudo estar tras su caída, porque la pronunció cuando comenzaron a destaparse historias malolientes internas del PP: “Cuando huelen las alcantarillas hay que limpiarlas, no hay que taparlas”. Días después se supo de sus ‘viajes a Canarias’ a costo del Senado.., y no pocos apuntaron a fuego amigo desde la cercana Castilla-La Mancha

Ya en el paroxismo, entre las monagadas destacar consejos de Redondo, como que el Presidente extremeño pronunciara palabras en euskera, gallego y catalán en su discurso navideño, o, aunque es difícil elegir, la más divertida, cuando intentó jugar con las palabras “Mas (Artur)” y “más y menos” y acabó de Groucho (Marx)

Monago se suicida en el cuello de Moreno Bonilla

Menos gracia le encontraron en Andalucía a otro de las ingeniosidades de Redondo: inventarse una campaña en la que, para resaltar los logros de Monago, miraban al sur y escupían sobre Andalucía. Los dos sures llamaron aquella campaña, basada en vídeos y que protagonizaban dos personajes de dibujo, Paco, un extremeño que vivía muy bien, y Curro, un andaluz que no sólo vivía mal, sino al que se pintaba con todos los clichés.

En Andalucía, Moreno Bonilla puso el grito en el cielo, en Génova les pidieron que retiraran el vídeo. Pero la pareja Monago-Redondo, en su soberbia no sólo no hicieron esto, sino que emitieron un segundo capítulo. En el ABC se llamó a Monago “mequetrefe con poltrona, bombero con cosas de bombero”. En Extremadura, incluso los suyos, dijeron que "el show político desplegado, ha contado con más neones y redobles de timbales que algunos musicales de Broadway".

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Ficha del 'Curro' andaluz que 'diseñó' el public affaires person, Ivan Redondo

La genial idea del public affaires person Redondo le costó al PP en Andalucía una considerable cantidad de votos en las municipales y autonómicas de 2015 (un ejemplo: se decía en el vídeo que el Curro imaginario era de Camas.., resultado, el PSOE sacó en el municipio sevillano en esas elecciones 12 diputados; el PP, 3). A Monago le costo el puesto.

La rapera y los ideólogos sin ideología

Situación, por cierto, a lo que también seguro que ayudó otra ocurrencia del analista Redondo: ‘vender’ la imagen de Monago con un rap (interpretado por una rapera que luego desvelaría que ella no le votaba), cuyo mensaje básico era ‘olvídense de la ideología’: “Algunos de los que eran verdes ahora son rojos, los rojos son azules, y a este Gobierno (el de Monago) el color le importa poco". Brillante.

Aun así, hay que insistir en la flotabilidad de Redondo, el public affaires person tiene su público. Y no nos referimos a que le tengan como habitual analista en el programa de Griso en Antena 3, no. Que también Pablo Iglesias le tuvo hace poco en su diván en La Tuerka, y le recibió con calificativos como “culto, rápido y sensible” y sentenciando que “es una pena que casi siempre haya trabajado para nuestros adversarios”. Vistos los resultados, la sentencia es tan discutible, parece, como sus ideas de asesor.

Eso sí, le gustó tanto la limpieza que le hizo Iglesias a su historial, que no hay más que entrar en la cuenta de Twitter de Redondo y Asociados (@thewarroomblog se llama, no es coña) para verlo: ahí, como Tweet fijado, el primero, que todo el mundo lo vea. Un genio en acción a la búsqueda de muñeco.