Los secretarios generales de la Unión General de Trabajadores (UGT) y Comisiones Obreras (CCOO), han comparecido hoy ante los medios de comunicación para presentar el manifiesto y las más de 70 movilizaciones para mañana, Día Internacional del Trabajo.  El Secretario General de UGT, Pepe Álvarez, ha llamado a participar en este Primero de Mayo, Día Internacional del Trabajo, “mirando a las necesidades de las personas. Este Día Internacional del Trabajo tiene que representar una exigencia y un clamor popular para cambiar las políticas, girar a la izquierda y hacer frente a las necesidades sociales”. El lema de la convocatoria de este año es “La lucha continúa. Más derechos, más igualdad, más cohesión. Primero las personas”.  Por su parte, el líder de CCOO, Unai Sordo, también pidió una participación masiva en las 75 manifestaciones que tendrán lugar en todas las provincias del Estado, y así propiciar que la agenda social se abra paso. “La agenda política se tiene que conciliar con la agenda social”, demandó. Dicho de otra manera: “La lucha contra la desigualdad y la construcción de un nuevo Contrato Social deben situarse en el centro de las prioridades de la agenda política”.

Álvarez añadió que los sindicatos apuestan por “luchar contra la pobreza, por el reparto de la riqueza, por situar la crueldad de los accidentes de trabajo, por asegurar la igualdad de trato y oportunidades y porque este día represente un punto de inflexión en las políticas que se vienen desarrollando en los diferentes países durante los últimos años”.

Exigir mejores empleos y salarios

Los líderes sindicales manifestaron su convencimiento de que este Primero de Mayo “tiene que servir para recuperar la calidad del empleo y el desempleo. Hay que acabar con la figura de los trabajadores pobres y con la precariedad, impulsando un plan de choque de manera inmediata que reduzca los 3,5 millones de personas que están en el desempleo en la actualidad; y un cambio de modelo productivo que nos ayude a generar empleo de calidad y con futuro”.

“Necesitamos repartir la riqueza”, reflexionó Álvarez. “Los que han cuestionado el aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a 900 euros son los que se reparten los beneficios en nuestro país. Los directivos del Ibex-35 ganan más que 15.000 trabajadores que cobran el SMI. Es una inmoralidad que cuestionen este aumento del salario mínimo. El Gobierno debería velar porque su acuerdo con Unidas Podemos se cumpla, porque las empresas están eludiendo aplicarlo. Nosotros vamos a ser implacables a la hora de que se aplique en los convenios existentes”. Sordo valoró de manera muy positiva la alta participación en las elecciones generales del domingo, que han confirmado que "existe en el país una mayoría progresista, en las que la ciudadanía ha rechazado a la extrema derecha y los discursos extremos de las tres derechas".

Unai Sordo fijó como prioridad abordar las reformas laborales que no han cabido en los diez meses de Gobierno del PSOE: “La derogación de los aspectos más lesivos de la reforma laboral es una condición previa para un nuevo Estatuto de los Trabajadores", afirmó - y garantizar el sistema público de pensiones, con la derogación de la reforma de pensiones del Partido Popular de 2013, además de que se recupere la revalorización con el IPC y se elimine el factor de sostenibilidad. En este sentido, el Secretario General de UGT ha situado la negociación colectiva “como uno de los pilares fundamentales de la recuperación de los salarios y la patronal tiene que ser consciente de que los sueldos tienen que llegar a 1.000 euros en 2020, tal y como firmamos en el IV Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), que contiene el aumento del salario mínimo por convenio a 1.000 euros en 2020”.

Más impuestos y luchar por la igualdad

Durante la comparecencia, Pepe Álvarez ha reclamado “recaudar más. Hay que revisar la política impositiva y recaudar más para dar mejores servicios. Nadie puede pensar que bajando los impuestos se van a poder dar más derechos a los ciudadanos y ciudadanas”.  Además, ha llamado a que esta jornada sea una continuación del 8 de marzo y que las políticas a favor de la igualdad y en contra de la violencia de género y el acoso “formen parte de las reivindicaciones de este Primero de Mayo”. Unai Sordo recordó que el crecimiento macroeconómico de los últimos años no se ha trasladado a los salarios. Asimismo, calificó de “escandaloso” que más de la mitad de los contratos indefinidos no pasen de los dos años de antigüedad y que la rotación en la contratación ascienda a 5,4 contratos al año.