UGT ha reaccionado a los datos definitivos de inflación de julio, en el 10,8%, con una petición que mantiene desde hace meses: la subida de salarios y el reparto justo de los costes. El sindicato denuncia que los datos del IPC conocidos este viernes siguen mostrando una inflación “desorbitada”, con una tasa que se eleva un 0,6% hasta máximos de septiembre de 1984.

Ante esto, la vicesecretaria general de UGT, Cristina Antoñanzas, denuncia que los salarios evolucionan “muy por debajo” del nivel general de precios, con un crecimiento de apenas el 2,6% hasta el mes de julio. Para UGT, esta diferencia se traduce en una pérdida “notable” de poder adquisitivo de los hogares españoles, algunos de los más afectados del conjunto de la OCDE. El último informe internacional revela que España es el segundo país con mayor pérdida de poder de compra de los hogares del conjunto de las economías avanzadas, con un 4,1% menos.

Esta devaluación salarial traslada sus efectos negativos al conjunto de la economía, según el sindicato, que se remite a los últimos datos de crecimiento publicados por el INE sobre la Contabilidad Nacional Trimestral. Así, alerta de que el menor gasto en consumo final y la caída de la aportación de la demanda nacional crecimiento interanual del PIB han mostrado una desaceleración “indudable” de la economía. “Sin ser alarmante, sí resulta preocupante, y debe tenerse en cuenta para diseñar la política económica”, advierte Antoñanzas.

La subida de salarios es "una necesidad ecómica y social"

Con esto, reclama la subida de salarios como “una necesidad económica y social de primer orden", con el objetivo de combatir el "continuo recorte" de la calidad de vida de los trabajadores, así como para sostener la actividad económica y la creación de empleo. En ese sentido, UGT reivindica un reparto justo de los costes asociados a la deriva inflacionista para que la clase trabajadora “no vuelva a ser la principal damnificada en un contexto de adversidad económica”.

El sindicato reclama también la necesidad de implementar medidas temporales y eficaces que pongan freno al crecimiento “descontrolado” de los precios de algunos productos y servicios básicos, “evitando que determinadas empresas y sectores sigan ampliando sus márgenes de beneficios a costa del empobrecimiento de los hogares”, denuncian. Asimismo, abogan por extender la cobertura de las cláusulas de revisión salarial en los convenios colectivos para ofrecer una mayor certidumbre a los hogares. “Se trata del instrumento más eficaz para salvaguardar el poder adquisitivo de las mismas”, asegura el sindicato.