Los ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE) tienen pendiente para el próximo lunes sacar adelante una nueva tanda de 500 millones de euros del fondo, cuyo objetivo es suministrar armamento a Ucrania. Asimismo, en esta reunión el bloque aprobará nuevas sanciones contra 37 individuos y entidades responsables de la represión contra las manifestaciones prodemocráticas en Irán. La gran parte de los Estados miembros de la UE se encontrarán una vez más con la habitual oposición de Hungría en esta séptima ronda desde que comenzó la guerra y que está fijada para conseguir 500 millones.

“Buscamos un acuerdo político este lunes, si no es entonces pasará más pronto que tarde”, ha señalado un alto cargo de la UE, aliviando el bloqueo planteado por Hungría. Esta tanda incrementará a 3.500 millones los fondos puestos a disposición de la UE para proveer de material letal a Kiev y se enmarca en los más de 11.000 millones de euros que Europa ha ofreció en apoyo militar a Ucrania. En esta misma línea, el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, espera recibir el visto bueno de los Veintisiete para financiar con 45 millones la misión de entrenamiento de soldados ucranianos en suelo europeo.

Con la vista puesta en conseguir un acuerdo en febrero, los Veintisiete seguirán las conversaciones sobre el décimo paquete de sanciones contra Moscú, con los primeros contactos durante el fin de semana. Si bien, fuentes diplomáticas esperan primero una propuesta "sustancial" por parte de la Comisión Europea. "No es un secreto que algunos países quieren ya el décimo paquete", han explicado, apuntando a que los próximos pasos pueden ser extender el tope al precio del petróleo para que incluya productos derivados.

Sanciones contra Irán y debate sobre la guardia revolucionaria

Más despejada parece la decisión de redoblar las sanciones contra Irán por la continua represión del régimen contra las protestas prodemocráticas tras la muerte de la joven Masha Amini. En la UE preocupa la espiral de violencia desatada por Teherán y es por ello que aplicará la quinta ronda de sanciones consecutiva contra las autoridades iraníes, añadiendo a su 'lista negra' a 37 personas responsables de la persecución de los manifestantes.

Sobre la mesa estará el debate de designar a la guardia revolucionaria iraní como organización terrorista para la UE, una cuestión que impulsan países como Alemania pero que no concita el consenso de los Veintisiete y sobre el que no hay una propuesta formal. Teherán ha amenazado con que este paso traerá "consecuencias devastadoras" para el acuerdo nuclear que la UE busca reavivar desde hace meses, intentando que Estados Unidos vuelva al pacto e Irán se comprometa con su total cumplimiento. Pese a defender la independencia de la UE a la hora de responder a las acciones de Irán, tanto en el plano interno como en su apoyo militar a Rusia, el alto cargo europeo ha opinado que "no es buena idea" añadir a la guardia revolucionaria iraní a la lista terrorista afirmando que "previene de avanzar en otros temas" con Teherán.