El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha participado este miércoles en el Foro Económico Mundial celebrado en Davos (Suiza) junto a otros empresarios y líderes mundiales, con el objetivo de anticipar el futuro de la economía internacional. Ángel Gurría, el secretario general de la OCDE, ha presentado a Sánchez como “flamante presidente” y “adalid del multilateralismo internacional”.  

En su segunda intervención en Davos, el presidente del Gobierno ha anunciado los cinco retos a los que se enfrenta la economía española. En primer lugar, ha destacado la importancia de la coalición y la cohesión, donde también ha destacado que la economía española crece a un mayor ritmo que la media de la eurozona.

“España tiene una economía claramente más robusta y equilibrada que en el pasado, más resistente a efectos internos y externos”, ha defendido Sánchez, que se ha marcado como reto cumplir con el “rigor fiscal”, reducir el endeudamiento y el déficit público para lograr una mayor confianza entre los agentes económicos.

En segundo lugar, Sánchez se ha centrado en la transformación digital, asegurando que “el capital humano será clave para el cambio tecnológico”. En esta línea, el presidente ha anunciado el impulso a la Formación Profesional en España para alcanzar los 200.000 puestos en 2025, así como formar a los formadores en los principales sectores productivos.

Además, Sánchez ha destacado la importancia de aprovechar las oportunidades de la cuarta revolución industrial para lograr un mundo más sostenible a través de una gobernanza multilateral.

 “Ningún crecimiento económico ni transición ecológica será justa si no se centra en las personas”

En cuanto al reto de la transición ecológica, uno de los principales problemas de Davos, el presidente del nuevo Gobierno ha recordado que es un reto a nivel mundial y que “seremos la última generación que podrá abordarlo”. Para ello, el Gobierno ha puesto en marcha por primera vez en la historia una Vicepresidencia de Transición Ecológica.

En este aspecto, Sánchez ha recordado que ayer se aprobó la Declaración de Emergencia Climática, con el fin de minimizar el uso del carbón apoyándose en fuentes renovables de energía, así como reducir las emisiones de gases de efectos invernaderos en un 20% hasta 2030.

Sin embargo, el presidente ha puesto en valor a las personas, por encima de las medidas: “Ningún crecimiento económico ni transición ecológica será justa si no se centra en las personas”, en línea con el Pacto Verde Europeo, que busca proteger a los más vulnerables. Así, el Gobierno pretende llevar a cabo una transición ecológica con oportunidades de modernización y creación de empleo para la sociedad.

El cuarto reto para el nuevo Gobierno es lograr la auténtica igualdad entre hombres y mujeres ya que, “una mayor participación de la mujer sobre la economía tendrá efectos positivos”, según el propio presidente. En este ámbito, el nuevo Ejecutivo tiene como objetivos alcanzar la igualdad salarial y laboral, potencial la conciliación y continuar con “la inquebrantable lucha” contra la violencia de género.

Desigualdad para niños y jóvenes

El último reto al que se enfrenta es alcanzar la justicia social, ya que la sociedad española presenta “niveles alarmantes de pobreza y vulnerabilidad social que aumentan la desigualdad”, según Sánchez. Así, asegura que no puede haber justicia social sin justicia fiscal: “No basta con redistribuir la renta, hay que hacerlo de manera justa”.

En esta línea, ha reconocido como puntos claves para el Gobierno asegurar el Estado de Bienestar y la cohesión social, con un crecimiento inclusivo y respetuoso con los ciudadanos. Esto se llevará a cabo a través del progreso colectivo y la protección social de los más vulnerables, según Pedro Sánchez, “fracasos de la era del neoliberalismo”.

El presidente ha mostrado su intención y ha pedido que el progreso económico no se haga a expensas de los seres humanos, con un salario mínimo vital con el que los ciudadanos puedan vivir “libres de pobreza”, así como reducir la presión sobre el Estado del Bienestar y la reforma del sistema público de pensiones.

En esta línea, el presidente ha destacado los niveles de desigualdad de la sociedad española, especialmente en el caso de los niños y los jóvenes. “Tenemos que hacer lo mejor posible para lograr la inclusión y la igualdad en niños y jóvenes, ya que tenemos un Estado de Bienestar mucho más centrado en las personas mayores que en los jóvenes. No se trata de enfrentar a los sectores, sino de reinventar las políticas sociales para que sean mucho más eficaces.”, ha reconocido Sánchez.

“Los ciudadanos creerán en la democracia si la democracia cree en ellos”

En cuanto a los retos políticos a los que se enfrenta el Gobierno, asegura que está dispuesto a actuar y asegura que “la extrema derecha y el populismo solo puede ser combatidos mediante la política del bien común”. Además, Pedro Sánchez ha reconocido: “Los ciudadanos creerán en la democracia si la democracia cree en ellos”.

Tras su intervención, Sánchez y el presidente de la OCDE han mantenido una conversación sobre los retos del futuro. Preguntado por la fragmentación y la polarización en Europa, el presidente del Gobierno se ha mostrado “bastante optimista” por haber superado dificultades como el Brexit: “Estoy deseando colaborar en un acuerdo muy positivo tanto para el Reino Unido como para la Unión Europea”.

En cuanto al descontento presente en América Latina, Sánchez ha reconocido que no es un área homogénea, lo que complica más el trabajo, así como que no cuentan con un sólido sistema fiscal. Sin embargo, asegura que desde la perspectiva europea y española, es muy importante apoyar el proyecto de integración regional y la colaboración, a través de alternativas como Mercosur o la Alianza en el Pacífico.