El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, interviene este miércoles en el famoso Foro Económico Mundial celebrado en Davos (Suiza). Se trata de uno de los escenarios con mayor representación de los poderes económicos, que charlan sobre el cómo, el cuándo y el dónde de la Economía internacional. Hablando en plata, se dan cita buena parte de las personas que mueven los hilos del capital. Si uno bucea en la prensa nacional, los titulares acusan a Sánchez de haber protagonizado un nuevo desplante al rey Felipe VI por acudir él y no el monarca. Hay medios que, incluso, insisten en que es un paso más de Sánchez para arrinconar a la Corona. Sin embargo, lo cierto es que el jefe del Estado tan solo ha ido una ocasión, en 2018, en sustitución de un Mariano Rajoy que siempre rechazaba la invitación de manera sistemática y se escudaba en otros altos cargos.
El año pasado, en enero de 2019, Sánchez fue el primer presidente del Gobierno que representaba a España en Davos desde José Luis Rodríguez Zapatero. Desde la llegada de Mariano Rajoy a la Moncloa, nunca acudió.
Lo importante en esta cita son las conversaciones privadas en los pasillos, la camaradería, las discusiones privadas… El idioma oficial del foro es el inglés, y los problemas de Rajoy con el inglés son de sobra conocidos.
Desde la formación popular siempre han negado que el ahora expresidente declinara la invitación por no saber inglés y siempre había una excusa superior. También negaban que la mala experiencia de su predecesor, Zapatero, fuera la causa (cabe recordar que el expresidente socialista tuvo que mantener el tipo ante las predicciones poco halagüeñas para España durante la crisis económica).
Rajoy tomó posesión del cargo el 20 de diciembre de 2011, y en enero de 2012 estaba agendada la cita en Davos. No fue y le sustituyó Luis de Guindos, entonces ministro de Economía. Cabe destacar que Rajoy acababa de anunciar uno de los mayores recortes de la historia de España.
En 2013, De Guindos vuelve a sustituirle; y en 2014, después de confirmar su asistencia, finalmente no va por “compromisos importantes en la agenda doméstica”. En su lugar, acudieron el ministro José Manuel Soria (cuyo final es de sobra conocido) y la alcaldesa de Madrid, Ana Botella.
En el año 2015 el Foro coincide con la convención del PP; y en 2016 Rajoy acababa de rechazar presentarse a la investidura a pesar del encargo del rey por no contar una mayoría parlamentaria suficiente. En ambos casos volvió a representar a España De Guindos.
Al año siguiente, en 2017, Rajoy argumentó que no iría porque tampoco acudían François Hollande, entonces presidente de Francia, ni la Canciller alemana, Angela Merkel. Conviene precisar que ésta es, sin duda, la peor excusa de todas, puesto que sus homólogos estuvieron presentes en citas anteriores y él no.
Fue en el año 2018 cuando Rajoy se escudó en el monarca y Felipe VI acudió a Davos. Era su primera vez, y utilizó su plataforma para afirmar aquello de “la Constitución española no es un mero ornamento”. Durante su discurso, hizo especial hincapié en el imperio y respeto de la ley y la firmeza ante la crisis catalana.
Pedro Sánchez, como presidente del Gobierno, estuvo en Davos 2019 y repite en 2020. A diferencia de Rajoy, Sánchez, como el rey, sí que domina el inglés y se muestra cómodo en estos ambientes.
La Casa Real tiene por costumbre no comentar ningún tipo de información, sea cual sea, y en este caso, no ha sido distinto. En declaraciones a ElPlural.com, Zarzuela se ha limitado a decir que “el rey tiene sus actividades ya programadas”, evitando así contribuir a alimentar la polémica. En la página web de Casa Real figura que Felipe VI estará en Jerusalén con motivo del 75 aniversario de la liberación de Auschwitz.
