El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha mostrado dispuesto a continuar las negociaciones con los ayuntamientos y el resto de grupos parlamentarios sobre el decreto ley que recoge el acuerdo alcanzado entre el Ejecutivo y la FEMP para la utilización del remanente y del superávit municipal para paliar el impacto del coronavirus en la economía española.
Así lo ha reconocido en la rueda de prensa celebrada tras el encuentro con el Rey Felipe VI en Palma de Mallorca, después de que el resto de partidos políticos se hayan negado a ofrecer el remanente de sus ayuntamientos al Gobierno.
El presidente ha reconocido la “voluntad de llegar a acuerdos” con los ayuntamientos, ya que asegura que tienen que ser una “parte protagonista” de la reactivación nacional. Asimismo, afirma que tiene la “mano tendida” a los consistorios para llegar un acuerdo.
La medida fue transformada en decreto ley en el Consejo de Ministros, pero debe ser votada en septiembre en el Congreso de los Diputados. Con las perspectivas de la votación anterior, con todos los partidos políticos en contra y Unidas Podemos en abstención, parece que el decreto ley tiene más posibilidades de ser derogado que refrendado.
Prolongar los ERTE más allá de septiembre
Por otro lado, Sánchez también se ha mostrado esperanzado a la hora de alcanzar un acuerdo en los próximos meses sobre la extensión de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) en el sector turístico más allá del mes de septiembre. En esta línea, asegura que el Gobierno ha hecho “una gran reforma” al ofrecer alternativas al despido.
El presidente ha explicado que ha trabajado para “mantener el empleo y vincularlo con el acuerdo social”, así como ha avanzado que está “hablando” con sindicatos y empresarios para llegar a un acuerdo. Sánchez ha asegurado que la voluntad del Gobierno es "claramente proteger el empleo en un sector que se ha visto dañado" por la pandemia “más grave de los últimos 100 años en todo el planeta”.
En cuanto al turismo, ha hecho hincapié en que el sector “es muy competitivo” y ha recalcado el diálogo social para proteger a "los cientos de miles de empleados que han visto congelada su actividad" como consecuencia del impacto del coronavirus.
