El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reunido a los grandes líderes del Ibex 35 en un encuentro informal en el que se ha escenificado la paz de Davos. Un encuentro con el que el líder del Ejecutivo cerró una intensa jornada de reuniones, entrevistas e intervenciones varias que terminaron con su intervención única en la 54 edición del Foro Económico Munidal -una "special address" según la agenda del Foro Davos 2024- a la que siguió, apenas una hora después, una reunión "informal" en una sala de un hotel cercano, el hotel Kongress, con los empresarios españoles que forman parte de la delegación del Ibex que ha viajado a los Alpes suizos esta semana. 

El propio Sánchez ha revelado los asistentes a la reunión a través de un video mudo en su cuenta de X (la anterior Twitter), con imágenes en las que se puede ver a empresarios como José Manuel Entrecanales, consejero delegado de Acciona; Hector Grisi, CEO de Banco Santander, en sustitución de su presidenta, Ana Botín; Carlos Torres Vila, presidente de BBVA y uno de los ponentes que ha participado en las primeras sesiones de Davos, que acudió acompañado de su consejero delegado, Onur GençMaarten Wetselaar, CEO de Cepsa, recién nombrado el consejero delegado con mayor visión de futuro según la revista Forbes; el polémico Rafael del Pino, presidente de Ferrovial; Ignacio Sánchez Galán, presidente y CEO de Iberdrola; Francisco Reynés como presidente y CEO de Naturgy; Josu Jon Imaz, consejero delegado de Repsol; José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica y otra de las estrellas de la delegación española en Davos, y José Luis Blanco, director ejecutivo de Nordex. 

 

Cordialidad: más IA y menos impuestos 

Fuentes presentes en la reunión aseguran que el encuentro transcurrió con normalidad, con un ambiente de cordialidad incluso con el presidente de Ferrovial, Rafael del Pino, protagonista de la operación empresarial del año tras llevarse la sede social de la compañía a Países Bajos desde su Madrid natal en abril de 2023 y objeto de fuertes críticas por parte del Gobierno. No obstante, según las informaciones reveladas por medios presentes en el Foro de Davos, el líder de Ferrovial no arropó a Sánchez en su intervención estrella en Davos en la tarde del miércoles. Tras la reunión, los asistentes dejaron constancia de un ambiente de cordialidad, sin referencias a los impuestos extraordinarios, los riesgos económicos nacionales o internacionales o cuestiones políticas como la amnistía. Todo lo contrario: la reunión se centró en los retos actuales de la Inteligencia Artificial (IA) y en la necesidad de regular de forma inteligente. 

Además de los grandes líderes del Ibex, especialmente representantes del sector financiero y energético, el encuentro informal entre el presidente del Gobierno y la representación empresarial española en Davos contó con la presencia del resto de la delegación del Gobierno que ha viajado a los Alpes para participar en el Foro Económico Mundial. El nuevo ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, se ha estrenado en el cargo a nivel internacional con su agenda en Davos y formó parte también del encuentro celebrado en un hotel de la ciudad suiza de Davos. Al actual líder económico del Gobierno se sumaron el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, y el ministro de Transformación Digital y Agenda Pública, José Luis Escrivá, además de dos nombres más: uno de los hombres de confianza de Pedro Sánchez, Manuel de la Rocha -uno de los nombres más repetidos en las quinielas de los últimos meses para sustituir a Nadia Calviño en el cargo- y Emma Aparici Vázquez de Parga, secretaria general de Asuntos Exteriores del Ejecutivo. 

Una de las ausencias más sonadas en la reunión informal de Sánchez con el Ibex es la de la presidenta de Banco Santander, Ana Botín, que sí que siguió en directo la intervención de Sánchez apenas dos horas antes de la convocatoria informal que cerró la agenda española del miércoles de Davos. Fuentes presentes en la reunión explican, en todo momento, que la lideresa del Santander no pudo acudir al encuentro por incompatibilidad de agenda y delegó su presencia en el consejero delegado de la entidad, Héctor Grisi. No obstante, Botín escenificó su saludo personal al presidente del Gobierno en los momentos previos al encuentro con el resto de empresarios españoles. La ausencia de Botín en una reunión como esta deja una imagen totalmente masculinizada, con solo una mujer en la sala del hotel en la que se celebró la reunión -la secretaria general de Asuntos Exteriores- en la que más de una decena de nombres claves para la economía española escenificaron la paz de Davos durante una reunión que duró alrededor de media hora. 

La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, junto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante su encuentro en el Foro de Davos
 

La agenda del presidente

El presidente del Gobierno ha protagonizado durante su estancia en Davos una intensa jornada de reuniones e intervenciones. Precisamente en sus sendas entrevistas con medios internacionales, la CNBC y Bloomberg TV, dejó clara su apuesta por empresas españolas como Indra y Telefónica, claves para la defensa y la ciberseguridad, no solo a nivel nacional. De hecho, en la entrevista concedida entre sus cinco reuniones con líderes mundiales del más alto nivel -Bill Gates entre ellos- el presidente del Gobierno celebró que su relación con los empresarios españoles es "muy positiva", quitando importancia al impacto del impuesto extraordinario diseñado por el Gobierno de coalición para las energéticas y los grandes bancos.

También en su "special address", solo acompañado en el escenario por el presidente del Foro Económico Mundial, Sánchez aprovechó la presencia de los grandes líderes del Ibex para lanzar un mensaje de agradecimiento y de apoyo, ante la mirada de todo el mundo como protagonista de la jornada de Davos. "Las empresas son esenciales para el crecimiento y el bienestar de un país. Crean empleo, innovación y oportunidades que nos hacen mejores" -defendió durante un momento de su discurso- "Ustedes -sus empresas- son un producto de la democracia. Un producto de un orden internacional basado en reglas, y de estados de bienestar que sostienen a las clases medias y trabajadoras, que garantizan la paz y aseguran niveles adecuados de capital humano y prosperidad".

El líder del Ejecutivo ha aprovechado sus intervenciones para acercar posturas con los empresarios españoles, asegurando que "tenemos empresas muy buenas". Un mensaje más que relevante para escenificar la colaboración público-privada en un momento clave para la recuperación económica tras el impacto de la pandemia. En definitiva, un mensaje conjunto de Sánchez y el Ibex que deja constancia de la paz alcanzada en Davos.