En la imagen, Alfredo Sáenz, durante la presentación de resultados de la entidad, del primer trimestre de 2013. EFE/Archivo

 

 


El consejero delegado del Grupo Santander, Alfredo Sáenz, ha renunciado de forma voluntaria a este cargo, en el que le sustituirá Javier Marín Romano, y al de vicepresidente del grupo, según ha informado la entidad. La renuncia se produce después de que el Tribunal Supremo confirmara el pasado 19 de abril una sentencia en la que anulaba parcialmente el indulto que le había concedido a Sáenz, lo que le permitiría recurrir en amparo al Tribunal Constitucional.

Sáenz se va del primer grupo financiero español antes de que el Banco de España se pronunciara sobre su honorabilidad, algo necesario para que pudiera seguir en el cargo.

Alfredo Sáenz fue condenado en marzo de 2011 por el Supremo por un delito de acusación falsa contra unos deudores de Banesto, entidad que presidió tras ser intervenida en 1993. Se incorporó al Grupo Santander en 1994, con ocasión de la adquisición de Banesto, desempeñando el cargo de presidente de dicha entidad hasta 2002, en que fue nombrado vicepresidente y consejero delegado de Banco Santander.

El consejo de administración ha expresado su reconocimiento y agradecimiento a la "extraordinaria" labor realizada por Alfredo Sáenz desde su incorporación al grupo y, especialmente, como consejero delegado de Banco Santander.

El nuevo consejero delegado del Grupo Santander, Javier Marín Romano, se incorporó al Grupo Santander en 1991 y hasta la fecha, era director general del banco y responsable de la División Global de Seguros, Gestión de Activos y Banca Privada.