La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha asegurado que "no habrá cortes de electricidad este invierno" ni domésticos ni industriales en España, ya que, tal y como asegura, desde el Ejecutivo han seguido de cerca la actividad de los operadores para poder determinar si se puede producir una falta de suministro el próximo otoño-invierno.

Estas declaraciones formuladas por la ministra durante su entrevista en Rac 1, se producen tras el anuncio de la Comisión Europea de acometer “una intervención de emergencia” para reformar el mercado eléctrico europeo. "En un 99% es imposible que haya algún tipo de corte, solamente si se añaden muchos factores inesperados, accidentes, problemas meteorológicos, podríamos encontrar algún tipo de limitación", ha explicado la titular de Transición Ecológica, tranquilizando así a la ciudadanía y justificando que la situación de España "no tiene nada que ver" con la situación de la mayor parte de los países centroeuropeos.

La ministra ha señalado que España se verá menos afectada por la escasez de gas y energía porque ha estado aislada como una “isla energética” y ha conseguido desarrollar “un sistema mucho más sólido y diversificado”. Sin embargo, ha matizado que "esto no supone que no nos afecte en absoluto, nos está afectando en los precios, porque los precios en los mercados internacionales están alterados y eso, evidentemente, acaba afectando a cualquiera que consuma gas natural, porque hay más demanda en ese producto".

Ribera ha asegurado que el principal objetivo del Ejecutivo es tomar todas las medidas posibles para "mitigar al máximo el impacto de los precios elevados a través de medidas regulatorias" a la par que se impulsan medidas de ahorro o se refuerzan las medidas de protección social.

“La energía como arma de guerra”

La vicepresidenta tercera ha valorado el “chantaje energético de Putin” asegurando que se está usando “la energía como arma de guerra”. "Es importante ver qué pasa con el precio del gas, a qué precio está dispuesto a comprarlo Europa, de qué modo la regulación puede disociar el precio del gas con el precio de la electricidad, porque el coste de producir electricidad no es el mismo coste que supone generar electricidad con gas", ha añadido Ribera al respecto.

"El precio del gas no puede ser el que marque el precio de toda la electricidad que consumimos, porque el precio del gas solo importa alrededor del 20% de la electricidad que consumimos, el resto se produce con otro tipo de costes que no tienen nada que ver con el coste del gas en los mercados internacionales y no tiene sentido retribuirlo de la misma manera", ha revindicado la ministra.

Apuesta por las renovables

Ribera ha aseverado que se tiene que apostar "definitivamente" por las energías renovables, con el objetivo de reducir al máximo las opciones basadas en gas y buscar alternativas de proximidad, como las renovables. "Es cierto que estamos en una situación difícil, pero también es verdad que nunca nos habíamos encontrado en una situación difícil con tantos recursos disponibles", ha manifestado la ministra.

“La mayoría de los países vamos con retraso”, ha asegurado la ministra con respecto a los acuerdos climáticos y defiende haber ido "muy despacio” en cuanto a la transición ecológica. Asimismo, ha asegurado que Cataluña también "va tarde" en la transición hacia las energías renovables, y espera que la Generalitat ponga en marcha mecanismos y políticas efectivas a este respecto.

Por otro lado, ha recordado que Cataluña es una autonomía muy industrializada, en la que, como en el resto de España, los ciudadanos esperan tener una “comodidad energética”, por lo que ha asegurado que "las pequeñas intervenciones no serán suficientes para cubrir la demanda de consumo" de renovables de los catalanes.