El dato avanzado del IPC de noviembre, en el 5,6% en tasa interanual, permite anticipar la revalorización de las pensiones a partir del próximo 1 de enero de 2022 en un 2,5%. La actualización de las pensiones en base al IPC está incluida en los nuevos Presupuestos Generales del Estado (PGE-aprobados hace apenas unos días- para asegurar la viabilidad del sistema.

Relacionado La inflación repunta hasta el 5,6%, en máximos de 29 años

La pensión media contributiva de 2022 y 2023 se calculará sobre la inflación media de este 2021, que cerrará previsiblemente en el 2,5%. A pesar de que el último conocido -la inflación en el 5,6%- es el dato de noviembre avanzado por el INE, las cifras de los últimos meses sitúan al IPC en máximos históricos y no se prevé que varíe más allá de algunas décimas el 15 de diciembre, con la cifra definitiva.

Tras haber empezado el año cerca del 0% por el impacto de la pandemia, el aumento del 0,4% interanual en noviembre sitúa al IPC de noviembre como el más alto de hace 29 años, desde septiembre de 1992. En este caso, Estadística explica la subida por el encarecimiento de los alimentos y los carburantes y lubricantes para vehículos personales.

Ahora, haciendo un cálculo medio con los datos disponibles -de diciembre de 2020 a noviembre de 2021- se cumplen las previsiones de los expertos, que anticipaban una subida de entre 2% y 3%. Los PGE no incluían una subida concreta de las pensiones, sino que se remitían a un cálculo del año anterior. 

Revalorización de las pensiones en los PGE

La revalorización de las pensiones según el IPC es una de las medidas aprobadas en la primera gran pata de reformas en junio, entre el Gobierno y los agentes sociales. El consenso supone un cambio desde el Índice de Revalorización de las Pensiones (IPR) hasta la actualización de la pensión según el IPC medio del año anterior, una recomendación propuesta en el Pacto de Toledo, y aprobada ya en los PGE de 2022. 

Relacionado Las cuatro claves del primer gran acuerdo sobre las pensiones

Los sindicatos celebraban en su momento este cambio en el sistema de pensiones, asegurando el poder adquisitivo de los pensionistas. "El acuerdo supone la derogación de la reforma de 2013, de manera que incluye una nueva fórmula de revalorización de pensiones ligada al IPC medio registrado que garantiza plenamente el mantenimiento del poder adquisitivo”, explicaban en un comunicado conjunto UGT y CCOO.

Este cambio en el sistema supone que ahora las pensiones tendrán una cuantía más acorde a la subida de los precios de la cesta de la compra diaria, sin afectar de forma negativa al poder adquisitivo de los pensionistas, no solo durante 2022, sino también en 2023. 

Escrivá garantiza la revalorización de las pensiones en base al IPC

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, aseguraba hace unos días que la revalorización de las pensiones según el IPC está garantizada. "Aseguramos que sea la inflación media del año anterior y se va a aplicar indefinidamente. Eso quiere decir que en cualquier ventana el poder adquisitivo de las pensiones, su revalorización con el IPC, está garantizada", ha prometido Escrivá.

Así, la subida de las pensiones contributivas estaría en el 2,5% -haciendo una media entre los máximos de los últimos meses y los mínimos de los primeros del año-, cerca de la subida del 3% para las pensiones mínimas y no contributivas, un aumento también aprobado en los Presupuestos Generales del Estado (PGE).

Relacionado Montero anuncia la subida del 3% para las pensiones mínimas, no contributivas y el IMV en 2022

De cumplir las previsiones de inflación, un total de 8,9 millones de pensionistas recibirían aproximadamente 30 euros más mensuales de media a partir del 1 de enero de 2022 por su pensión. En cifras, la pensión media quedaría entonces alrededor de los 1.070 euros mensuales, con aproximadamente 420 euros más a nivel anual.

La subida será mayor para los 6,1 millones de jubilados, con una subida mensual prevista de 34 euros, que dejaría la prestación en los 1.228 euros, aproximadamente 476 euros más al año. En el tercero de los casos, aquellos que reciben una pensión mínima o no contributiva subirán en un porcentaje fijo del 3% a partir del 1 de enero de 2022.

Paguilla para los pensionistas

El último dato del IPC también sirve como medida para cifrar la paguilla de los pensionistas, es decir, aquella paga que reciben en caso de una desviación de precios frente a la revalorización inicial de las pensiones. Un aumento que en 2021 ha sido del 9%. 

Con este panorama, Escrivá ha cifrado el coste de esta paga compensatoria en unos 1.900 millones de euros, que se abonarán el próximo mes de enero a los pensionistas, pero con efecto presupuestario en 2021. A esta cifra habría que sumar la misma cuantía para consolidar la nómina de las pensiones de cara a 2022, junto con la compensación por la desviación de precios. 

Así, el Gobierno destinará alrededor de 3.800 millones de euros a la paguilla que los pensionistas recibirán en enero, según las previsiones.