El banquero y economista Francisco Luzón ha fallecido este miércoles 17 de febrero, a los 73 años, tras pasar los últimos años luchando contra la ELA. El ex banquero fue una figura histórica en la banca española y en su desarrollo en Latinoamérica, con experiencia en los grandes bancos españoles, y ocupó altos cargos del BBV, Argentaria y el Banco Santander.

En el ámbito personal creó la Fundación Francisco Luzón para ayudar a mejorar la calidad de vida de enfermos de ELA y potenciar la investigación para encontrar una cura para la enfermedad. En julio de 2014, el banquero fue diagnosticado de esclerosis lateral amiotrófica (ELA), que padecía desde años antes, según confirmó el neurólogo puertorriqueño José Carlo.

Su vida dio un vuelco desde ese momento pero Luzón no perdió la fuerza para mejora la calidad de vida y la situación de los pacientes que sufren esta enfermedad, tal y como ha destacado en varias ocasiones Fernando Escribano, amigo y compañero de su Fundación.

Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Bilbao gracias a una beca, se posicionó como uno de los mejores banqueros nacionales, con una exitosa carrera en los bancos más importantes de España. Luzón ocupó los altos cargos en el Banco de Bilbao y de Vizcaya en el momento de su fusión.

Experiencia en el sector público

No solo desarrolló su carrera en el sector privado, sino que también ha trabajado en la banca pública como presidente del Banco Exterior de España, con el Gobierno socialista y el ministro de Economía Carlos Solchaga. Fue en este ámbito cuando creó la corporación que más tarde se convertiría en Argentaria.

Con el cambio de Gobierno y la llegada del Partido Popular al poder en 1996, el economista pasó al Banco Santander como consejero y director adjunto al presidente Emilio Botín. También en dicha entidad participó en la fusión del Banco Central Hispano y fue uno de los protagonistas de la expansión del Banco Santander en Latinoamérica.

En el Santander permaneció hasta 2012, internacionalizando la entidad en una decena de países, cuando se jubiló de forma anticipada con una prestación de más de 55 millones de euros. Solo dos años más tarde, el ex banquero fue diagnosticado de ELA.