El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE) y ex ministro de Economía del Gobierno de Rajoy, Luis de Guindos, ha reconocido que la repuesta económica del Gobierno a la crisis provocada por el impacto del coronavirus "es el plan correcto" y espera que "todo el mundo lo apoye".
Pedro Sánchez anunció ayer la inversión de 200.000 millones de euros, el 20% del PIB nacional, para paliar el impacto económico y social de la pandemia, de los que 117.000 millones corresponderán únicamente a capital público.
En una entrevista a RNE, el ex ministro económico ha destacado la importancia de los 100.000 millones de euros en avales, ya que el Banco Central Europeo (BCE) ha dado "toda la liquidez del mundo a los bancos, pero si estos dudan de la solvencia de los clientes esta liquidez no vale para nada". Así, ha señalado que el plan del Gobierno servirá de garantía y permitirá hacer llegar la liquidez del BCE: "Eso está muy bien visto y muy bien planteado".
Asimismo, Guindos ha subrayado la importancia del resto de medidas anunciadas por el Gobierno para facilitar la flexibilidad de la situación de los trabajadores y de las empresas. Así, ha afirmado a RNE: "Todo lo que sean ayudas a los trabajadores, ERTES o bajadas de cotizaciones van en la dirección correcta".
"Sería importante tener una respuesta paneuropea"
Sin embargo, el vicepresidente del BCE no se ha mostrado tan satisfecho con las medidas europeas y ha lamentado la actuación comunitaria: "Creo que sería importante tener una respuesta paneuropea, contar con un instrumento fiscal para la zona euro hubiera sido muy importante".
En esta línea, no descarta recurrir a organismos como el MEDE, el fondo de rescate financiero europeo, con una capacidad de 410.000 millones de euros. "Con esa capacidad de fuego tenemos un instrumento interesante", ha señalado.
El ex ministro de Rajoy ha explicado también que esta crisis no es igual que la de 2008 por su carácter temporal: "Nos enfrentamos a una pandemia que afecta muchísimo a la actividad económica, pero la diferencia es que esperamos que sea temporal. Estamos hablando de semanas o meses, no más allá", ha expresado.
Además, ha reconocido que por el momento se trata de una crisis sanitaria y no una crisis financiera, "aunque podría desembocar en ello". Por ese motivo, advierte que el BCE puede aliviar las tensiones financieras pero recalca la actividad fundamental de los gobiernos a nivel nacional. Para ello, el BCE comprará 120.000 millones de deuda adicionales y advierte que está vigilando que los mercados no sufran situaciones de fragmentación con las primas de riesgo.
Finalmente, Guindos ha restado importancia a una potencial bajada de los tipos de interés y ha defendido que lo fundamental es actuar con medidas de liquidez y con la compra de bonos. "Eso es mucho mas poderoso que tocar los tipos", ha reconocido expresando su confianza en que la tranquilidad volverá a los mercados y la actividad repuntará con fuerza una vez controlada la epidemia.
