Los secretarios generales de UGT y de CCOO, Pepe Álvarez y Unai Sordo, han instado hoy al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a derogar la reforma laboral aprobada por el PP en 2012, pero sin volver al marco anterior, sino avanzar hacia un modelo más inclusivo y democráctico.

Tras el encuentro mantenido en Moncloa con Pedro Sánchez y la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, a la que también ha asistido la patronal, los secretarios generales han comparecido ante los medios para calificar de positiva la reunión y celebrar que sea la primera del presidente.

Derogar la ley del PP, pero sin volver a la anterior
El presidente de Comisiones Obreras, Unai Sordo ha subrayado la necesidad de modificar "de forma sustancial" la regulación laboral, lo que pasa por modificar las reformas "por elevación", es decir, no volver al marco de trabajo de 2009 sino crear uno "mucho más inclusivo y democrático" que preste especial atención a jóvenes y mujeres.

"Se pueden adoptar medidas desde ya", ha considerado el líder sindicadl, al tiempo que ha abogado por buscar consenso para que las modificaciones cuenten también con el apoyo de las organizaciones empresariales, algo que podría iniciarse desde la negociación salarial.

De la misma manera, Pepe Álvarez ha instado a "la derogación de las reformas laborales" sin volver a la legislación anterior, sino incorporar cuestiones que ya querían incluirse entonces.

El Gobierno no aclara cómo va a modificar la ley
Ambos líderes han indicado que el Gobierno no ha detallado cómo va a modificar la legislación laboral, como corresponde a un primer encuentro, y han citado entre los primeros factores que hay que suprimir la prevalencia del convenio de empresa sobre el sectorial.

Con respecto a un "hipotético" acuerdo salarial con la patronal, los líderes de UGT y CCOO han indicado que está "cercano pero no cerrado" en palabras de Sordo y "más avanzado" de lo que estuvo el pasado año, según Álvarez, al tiempo que han insistido en que tiene que recoger una importante subida salarial, especialmente para las rentas más bajas.

Pensiones, fraude fiscal y economía sumergida
Otras cuestiones abordadas en la reunión han sido la lucha contra el fraude y la económica sumergida, la necesidad de recuperar una industria de calidad -una materia en la que Álvarez ha mostrado su preocupación porque las competencias de energía estén separadas de las de industria- o la formación profesional.

En materia de pensiones, los dirigentes sindicales han pedido al Gobierno que mejore la estructura de ingresos del sistema -por ejemplo, revisando bonificaciones- como primer paso para otras medidas estructurales, al tiempo que han destacado la necesidad de derogar la reforma de 2013, que introducía el factor de sostenibilidad.

Los sindicatos piden una subida salarial
Por otra parte, los sindicatos han manifestado su apuesta por una subida salarial. En un comunicado, UGT ha reclamado hoy que los sueldos aumenten al menos lo mismo que la inflación, una medida de "justicia social" que, según el sindicato, "deben asumir las empresas que obtienen beneficios históricamente elevados".

UGT ha recordado que su propuesta ante la patronal pasa por incluir cláusulas de garantía salarial en los convenios que "preserven el poder adquisitivo de la evolución de los precios", para que los trabajadores recuperen parte del poder adquisitivo perdido durante la crisis. El sindicato ha insistido en su reclamación de un salario mínimo en convenio de 1.000 euros al mes, para que "se dignifiquen" las retribuciones más bajas y se reduzcan los niveles de pobreza y desigualdad entre los trabajadores.

Asimismo, ha reclamado al nuevo Gobierno "la inmediata adopción de medidas" para reducir la precariedad, mejorar las condiciones laborales y equilibrar la negociación colectiva, por lo que "es preciso revertir la reforma laboral".

El secretario confederal de Organización de CCOO, Fernando Lezcano, ha defendido, también este miércoles, que la negociación colectiva "debe dejar atrás las dinámicas de moderación" y acordar un incremento salarial mínimo del 2 % anual, para que los trabajadores recuperen poder adquisitivo frente al repunte del IPC.

En una nota de prensa, Lezcano ha explicado que la evolución de los precios en mayo "grava a las familias más modestas y pone de manifiesto cierta atonía en la demanda interna", por lo que hay que llevar a cabo una política económica que estimule el consumo y el empleo. Ha recordado que la moderación salarial persiste todavía en convenios plurianuales que afectan a 5 millones de trabajadores, una política que "no ayuda nada a la recuperación económica".

CCOO también defiende que resulta necesario impulsar los salarios de los trabajadores para garantizar la sostenibilidad a futuro de las pensiones, reducir la desigualdad con la mejora de las prestaciones sociales y evitar la pobreza laboral.