El gobernador del Banco de España, Luis María Linde, comparece, por segunda vez, el martes en la comisión del Congreso que investiga la crisis financiera, después de que la entidad supervisora enviara una carta a esta comisión rebatiendo las acusaciones de la Asociación de Inspectores.

Linde abrió el 12 de julio de 2017 las primeras sesiones de esta comisión, que prevé debatir la ponencia y el dictamen de conclusiones en los meses de octubre y noviembre, con el fin de que pueda ser votado en el pleno del Congreso antes de final de año.

El gobernador del Banco de España volverá además al Congreso previsiblemente la semana del 16 de abril para iniciar el turno de comparecencias previstas en la Comisión de Presupuestos, de cara a la tramitación de las cuentas de 2018 y antes de que finalice así su mandato en junio.

Los portavoces de la comisión de la crisis financiera aprobaron la nueva comparecencia de Linde, una vez recibida una carta firmada por el Consejo de Gobierno del organismo supervisor. En la misiva, la cúpula del Banco de España lamentaba las acusaciones del presidente de la Asociación de Inspectores del Banco de España a su paso por esta comisión, Pedro Luis Sánchez, que negó los argumentos de la dirección de que no hubiera un soporte jurídico legal para frenar el aumento del crédito.

El ex director general de supervisión del Banco de España Mariano Herrera defendió la semana pasada la inspección que llevó a cabo el organismo tanto frente al Banco Popular como sobre la salida a Bolsa de Bankia. En los informes sobre Bankia, "los inspectores no decían que las cuentas estaban mal" y mostraban, en concreto los hechos en 2011, que "las provisiones existían".

Herrera también afirmó que la inspección del Banco de España "veía desde 2009" el "riesgo" en los activos inmobiliarios del Banco Popular, por lo que le "solicitó" que tomase medidas. La carta enviada por el Banco de España al Congreso califica de "inaceptables" y "graves" las acusaciones hechas por los inspectores del Banco de España, y señala que la entidad ha atendido siempre con "rigor y diligencia" las solicitudes de información de las autoridades judiciales, en relación al caso Bankia.