La Audiencia Nacional ha abierto una investigación contra Caixabank SA por un supuesto delito de blanqueo de capitales por la actuación de diez de sus sucursales en el presunto favorecimiento, auxilio y ocultación de fondos de clientes de nacionalidad china investigados en las operaciones conocidas como Emperador, Chequia, Snake, Juguetes y Pólvora.

El juez considera que las sucursales investigadas, directivos y empleados actuaron presuntamente “como canales de blanqueo de dichas organizaciones” aun cuando podían sospechar que sus clientes estaban inmersos en actividades ilícitas de fraude del que procedían las ingentes imposiciones en efectivo que realizaban”.

Por esto, el juez Ismael Moreno ha citado a la entidad a la entidad el próximo 26 de abril a las 10.30 con objeto de que proceda a la designación de abogado y procurador.

Caixabank niega cualquier vinculación

Desde Caixabank han negado a El Plural“cualquier tipo de colaboración en cualquier tipo de blanqueo de capitales presuntamente cometidos” y asegurando que, “si esto ha pasado no ha sido con nuestra colaboración”.

Así mismo, la entidad defiende mantener “una fuerte cultura de cumplimiento normativo” en todo lo relativo a prevenir e impedir el blanqueo de capitales.

Dinero proveniente de delitos contra Hacienda

El auto del juez al que ha tenido acceso El Plural explica que, a raíz de la investigación a la entidad ICBC por conductas de blanqueo de capitales al servicio de diversas organizaciones criminales de ciudadanos chinos, el Grupo de delitos Económicos de la Guardia Civil, así como el SEPBLAC detectaron una serie de comportamientos irregulares llevados a cabo por determinadas sucursales de Caixabank entre los años 2011 y 2015, para ayudar presuntamente a personas físicas y sociales de nacionalidad china a aprovecharse de las ganancias ilícitas de sus defraudaciones y contrabando de mercancía.

Estas organizaciones generaban unas masivas remesas de dinero en efectivo, procedentes de delitos contra la Hacienda Pública y en menor medida contra la Propiedad Industrial y Contrabando “en cuya bancarización sin riesgos de ser descubiertos, aprovechamiento y ayuda para transferir sus fondos a China han intervenido entidades bancarias como Caixabank e ICBC Sucursal España”.

Sucursales de Caixabank no atendieron los requerimientos judiciales

El auto del juez relata cómo entre 2013 y 2015 distintos juzgados de localidades de Madrid y de la Audiencia Nacional que investigaban los casos Emperador y Snake, entre otros, realizaron diversos requerimientos a las sucursales de Caixabank  para averiguar el patrimonio ilícito de los clientes investigados.

Las sucursales implicadas “hicieron caso omiso” al hecho de  tratarse  de clientes requeridos por juzgados y fiscalías, y “auxiliaron a los titulares de cuentas en el aprovechamiento de sus ganancias ilícitas, bancarizando el dinero sin indagar su origen.

Esos requerimientos judiciales, añade el juez, “fueron desatendidos por Caixabank que no activó ninguna comunicación o alarma respecto al cliente en cuestión”.

Responsabilidad ‘in vigilando’

Los hechos relatados en el auto describen, según el juez, graves fallos del sistema de control para la prevención del blanqueo de capitales, que se habían puesto de manifiesto desde 2013 y que eran conocidos por todo el personal directivo de la entidad Caixabank.

Por todo esto, el magistrado Ismael Moreno considera procedente incluir a la entidad como persona jurídica, sin perjuicio de los indicios de responsabilidad descritos en las 10 sucursales investigadas, por hechos ajenos cometidos por sus empleados y directivos, basados en la responsabilidad “in elegendo, in vigilando o in instruendo” de los administradores respecto a los hechos cometidos por sus empleados.

Esa responsabilidad es transferida a la persona jurídica, en tanto que Caixabank no implementó las medidas necesarias y adecuadas de prevención, pese a conocer los riesgos en los que incurrió su red de sucursales y cajeros automáticos y tener las herramientas necesarias para ello.