La comisión de Control Presupuestario del Parlamento Europeo ha desembarcado en España, supuestamente para analizar el despliegue de los fondos europeos, revestida de polémica. La culpable de esta situación no es otra que la presidenta del órgano, Monika Hohlmeier, eurodiputada del PP europeo salpicada por escándalos de corrupción, acusaciones de compra de votos, amenazas a compañeros de partido y atropello con fuga. Con este currículum, ha sido la elegida por la derecha y ultraderecha, comandada por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, para atacar al Gobierno.

España es el país más avanzado en la percepción de fondos Next Generation, más después de recibir la autorización del tercer desembolso el pasado viernes, lo que ha llevado a la Comisión Europea, institución que evalúa el cumplimiento de objetivos y da el visto bueno para su reparto, a deshacerse en elogios con el Gobierno español. Esto no ha supuesto un impedimento para la política de la CSU alemana que, desde que se oficializó la expedición, en la que estará acompañada por el ultraderechista español Jorge Buxadé (Vox), no ha cejado en su ataque contra Nadia Calviño, vicepresidenta y ministra de Economía, y el despliegue de los fondos.

"Iremos a España porque el Gobierno no nos dice dónde están los fondos de recuperación. Espero que al menos nos den una lista de proyectos y la cantidad que se ha invertido en cada uno”, aseguraba Hohlmeier en una entrevista concedida a ABC que completó con una declaración de intenciones en OK Diario: "No hay mucho entusiasmo en el Gobierno español ante nuestra visita". Sorprendentes declaraciones teniendo en cuenta que el discurso de Bruselas no solo desmiente a la hija del nazi Franz Josef Strauß, sino que aluden justamente lo contrario.

De hecho, el documento presentado por la Comisión Europea para comunicar la autorización para el tercer desembolso recogía lo siguiente: “El 11 de noviembre de 2022, España presentó a la Comisión una solicitud de pago basada en la consecución de los veinticuatro hitos y cinco objetivos establecidos en la Decisión de Ejecución del Consejo para el tercer tramo. Los hitos y objetivos alcanzados demuestran una vez más que se han registrado importantes avances en la ejecución del plan de recuperación y resiliencia de España”. Desde el Gobierno español tienen clara la intención de la eurodiputada alemana, aunque aseguran que facilitarán todo lo requerido al no tener nada que es esconder, añaden, porque “lo estamos haciendo bien”.

Acusaciones de corrupción

La líder de la misión del Parlamento Europeo es de sobra conocida en tierras bávaras, donde se vio salpicada por un caso de corrupción que se asemeja mucho al que involucra a otra lideresa del PP -Isabel Díaz Ayuso- que la ha recibido con los brazos abiertos en su llegada a España: “Maskenaffäre". en alemán; caso mascarillas, en español. Y no son de grado menor los presuntos delitos que recaen sobre las espaldas de la ex ministra de Estado de Educación y Cultura de Baviera, ya que, se le acusa de haber aprovechado su posición para interceder en favor de su amiga de la infancia, Andrea Tandler, que se embolsó 48 millones de euros con el tráfico de mascarillas sanitarias.

Un contrato millonario, con un coste superior al valor real y una calidad escasa, al que pudo acceder solo por la intermediación de Hohlmeier. La amiga de la infancia se encuentra ahora en prisión provisional acusada de aprovechar la crisis sanitaria mundial de la Covid-19 para enriquecerse y la eurodiputada alemana señalada por haber servido como enlace con el ministro de Salud, Jens Spahn. A priori, no ha podido demostrarse que la mandataria que ahora visita España obtuviese contraprestación económica por sus servicios, pero ha quedado constatado su participación para favorecer a una persona cercana. Múltiples coincidencias con casos conocidos en España.

Coacción a compañeros y atropello con fuga

No se quedan en corrupción los escándalos que salpican a Hohlmeier. Como presidenta de la ministra de Educación de Baviera, en 2005 se vio involucrada en una trama de amenazas y coacciones a compañeros de su propio partido, a la par que un posible fraude electoral para liderar la CSU en Munich, que, finalmente, la llevaron a dimitir y pedir disculpas. Catorce años después, la eurodiputada volvía a copar las portadas alemanas después de que el Parlamento Europeo le retirase la inmunidad para ser investigada por un atropello con fuga.

Al margen de estas acusaciones, Hohlmeier también ha ganado protagonismo en alguna ocasión por sus palabras en las instituciones. “Los terroristas votarían a la izquierda”, aseguró en el Parlamento Europea. Ahora aterriza en España exigiendo transparencia al Gobierno de coalición, acusándolo de mala gestión, después de votar el pasado abril en contra de implementar mayor transparencia sobre las comisiones, destinadas a dietas y gastos, percibidas por los eurodiputados. Su visita durará tres días y estará repleta de reuniones con empresas, patronales, medios de comunicación conservadores y líderes autonómicos como Javier Fernández Lasquetty, consejero de Economía, Hacienda y Empleo de Ayuso.