El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha presentado este viernes los resultados trimestrales de la entidad, con un beneficio atribuido acumulado de 726 millones de euros, un 42,6% menos que en el mismo periodo de 2019 por las provisiones extraordinarias de 1.161 millones de euros por el impacto del coronavirus.

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Más allá de los detalles sobre la situación financiera de CaixaBank, el CEO se ha centrado en la fusión con Bankia, una de las operaciones financieras más importantes del año incluso a nivel europeo. Tal y como han reconocido los directivos de ambas compañías, la fusión definitiva se realizará en marzo de 2021 y será a partir de aquí cuando valoren con los sindicatos el posible recorte de plantilla, según confirmó el CEO de Bankia.

En este caso, Gortázar se ha mostrado tajante con la fusión y ha asegurado: “No queremos un CaixaBank que controle Bankia. Queremos una fusión igualitaria, sin trato de favor”, a pesar de que la operación será una fusión por absorción.

Además, el CEO de la entidad ha reconocido: “No he visto nunca más competencia financiera de la que hay ahora” ante la pregunta de si anticipan nuevos procesos de fusiones en el mercado financiero español. En cuanto al pago de dividendos de la nueva entidad, ha avanzado que se hará después de la fusión, una vez formalizada la nueva CaixaBank.

Subida del PIB "muy positiva" 

Por otro lado, el consejero delegado de la entidad ha calificado como “muy positiva” la subida del PIB nacional del 16,7% en el tercer trimestre y se muestra “convencido” de que acabará el año con una caída inferior al 12,5%, cumpliendo con las perspectivas económicas. El CEO ha hecho hincapié en que el aumento de restricciones por la pandemia “genera incertidumbre” en toda Europa a nivel económico y financiero.

En esta línea, reconoce que los créditos ICO han sido una medida muy útil, asegurando que “ha funcionado muy bien. Ha llegado la liquidez en un momento en que era muy necesaria”. Así, pide que se prorroguen los créditos del Instituto de Crédito Oficial (ICO) a empresas, así como los periodos de carencia, con el fin último de paliar el impacto de la pandemia en su negocio.

"El sentido común hace pensar que una buena herramienta tenemos que alargarla en el tiempo", defiende Gortázar mientras la sociedad española se encuentra inmersa en la segunda ola del coronavirus. "No solo es mantener liquidez, sino que hay que hacer más cosas en determinados ámbitos y evidentemente con ayudas directas", asegura haciendo clara referencia a las empresas españolas.