Telefónica ha presentado su plan estratégico a tres años, para el periodo 2023-2026, con dos objetivos clave: asegurarse una generación de caja de 5.000 millones de euros para 2026 y el pago de dividendo entre sus accionistas. La teleco ha diseñado su hoja de ruta para los próximos años bajo la denominación plan GPS, por las siglas en inglés de los tres ejes de su nuevo plan estratégico para liderar la era digital: Crecimiento, Rentabilidad y Sostenibilidad. En otras palabras, Telefónica espera más crecimiento, menos deuda y una sólida retribución al accionista para los próximos tres años. 

La compañía ha presentado su plan estratégico este miércoles, con una primera comunicación oficial a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), coincidiendo además con la presentación de sus resultados financieros correspondientes al tercer trimestre. Este mismo mediodía la cúpula de Telefónica, liderada por José María Álvarez-Pallete, explicará los detalles de su plan GPS en el Investor Day celebrado con analistas y accionistas en Madrid. Un encuentro en el que, previsiblemente, Pallete tendrá que comentar la posible entrada de la SEPI en el capital de Telefónica tras el anuncio de la irrupción sorpresa de Saudi Telecom Company (STC) en el accionariado de la compañía, así como las últimas novedades conocidas sobre el plan de inversión de capital saudí en Telefónica.

“Estamos en los albores de la era digital. En Telefónica, hemos llegado hasta aquí siendo fieles a nuestros valores y cumpliendo nuestros principales objetivos. La operadora se ha reinventado por completo porque la conectividad es la base de todo lo relacionado con lo digital. En Telefónica tenemos una nueva visión y ambición renovada para liderar el futuro, porque no somos sólo una compañía de telecomunicaciones, somos algo más grande y aun mejor. Ahora somos un supercomputador. En este nuevo mundo digital, el sector necesita urgentemente una completa desregulación. La mejor forma de garantizar la autonomía estratégica de Europa y del sector de las telecomunicaciones es un marco regulatorio adaptado a las necesidades de los nuevos tiempos. Nuestro plan GPS es la más valiosa herramienta de crecimiento y estabilidad de la compañía para encarar con éxito su centenario y seguir dando el mejor servicio”, ha explicado el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete.

Telefónica refuerza sus objetivos financieros para los próximos años

El plan GPS de Telefónica contempla entre sus objetivos principales, a nivel financiero, alcanzar un crecimiento anual aproximado del 1% de sus ingresos en los próximos tres años, así como un aumento del EBITDA del 2%, una mejora de la caja operativa del 5% y un 10% más de generación en caja hasta llegar al objetivo de los 5.000 millones de euros. La mejora de las cuentas financieras permitirá a Telefónica aumentar la retribución a sus accionistas, con el reparto de un dividendo de, al menos, 0,30 euros por acción para el periodo 2023-2026.

La aceleración del plan GPS de Telefónica se apoya en cinco vectores centrados en el crecimiento de los segmentos B2C y B2B, en los ingresos derivados de la relación con sus partners, en la obtención de mayores eficiencias y en mantener el perfil diferencial de la compañía con una menor inversión. Dentro del plan estratégico para los próximos tres años, la multinacional de Pallete contempla también la reducción de la deuda financiera neta hasta una ratio de endeudamiento de entre 2,2 y 2,5 veces el EBITDA de cara a 2026.

Una vez confirmado, y constatado, que la compañía ha sido capaz de superar sus mayores exigencias de inversión, los objetivos de su nuevo plan GPS anticipan también una progresiva reducción de las inversiones sobre ventas. En concreto, el plan prevé que el porcentaje quede por debajo del 12% a tres años, en 2026, con una caída de más de dos puntos porcentuales con respecto a los objetivos marcados para este 2023. En esta línea, la multinacional ha anunciado en su plan previsiones adicionales por negocios. En el caso del segmento minorista (B2C), la tasa anual media de aumento de sus ingresos prevista para el periodo 2023-2026 se situará en el 1,5%, un porcentaje que aumenta en el caso del segmento empresarial (B2B) hasta el 5%, con el fin de mantener y continuar con la favorable evolución de los últimos trimestres.

Telefónica ha presentado su nuevo plan estratégico al mercado este miércoles tras cumplir con los objetivos financieros comprometidos para este ejercicio 2023, presentados en 2019 y revisados al alza en el mes de julio, así como su compromiso de retribución al accionista. Todo ello deja a la compañía preparada para celebrar su centenario después de ejecutar un fuerte proceso de transformación que ha permitido a la compañía elevar su ambición y adaptarse a la nueva era digital. 

La compañía prevé cumplir los primeros objetivos en 2024

La multinacional ha cumplido con lo anunciado en su plan de 2019 y refuerza ahora su hoja de ruta de cara a los próximos tres años. De cara a los próximos tres años, la compañía incluye novedades en su plan GPS en términos de comunicación y transparencia. Así, ha anunciado que presentará la información financiera de una nueva forma, con el objetivo de simplificar conceptos. A partir de ahora, el guidance de Telefónica pasa a expresarse en términos reportados y se incluye una nueva referencia para la generación de flujo de caja.

La compañía se emplaza ya a cumplir con los primeros objetivos del plan GPS en 2024, en el próximo ejercicio económico, como prueba de que está preparada para lo que propone en su hoja de ruta. Entre otros, Telefónica prevé ya que el FCF crecerá en 2024 alrededor del 10% y que las inversiones sobre ventas bajarán del 14%. Un escenario que se basará tanto en la disminución de la intensidad de capital como en la ambición del grupo de aumentar los ingresos y el EBITDA plasmada en su nuevo plan. Por otro lado, la teleco ha presentado también este miércoles los resultados correspondientes al tercer trimestre del año, con un beneficio neto de 502 millones de euros al cierre de septiembre, un 9,3% más frente al periodo anterior.

La transformación de Telefónica hacia la nueva era digital queda constatada en la mejor calidad de las redes y en la cada vez mayor relevancia del cliente. Asimismo, las novedades quedan marcadas en la optimización de las operaciones y en el compromiso firme con la sostenibilidad de la compañía. El plan GPS de Telefónica se apoya ahora en cinco vectores clave para acelerar su cumplimiento: la sostenibilidad del crecimiento de los ingresos B2C; el mantenimiento del negocio B2B; la evolución de los ingresos derivados de los acuerdos con los partners de la compañía; la obtención de eficiencias que ayuden a reducir la estructura de costes y, finalmente, la reducción de la inversión manteniendo el perfil diferencial de Telefónica en el sector de las telecomunicaciones.

La compañía defiende en el documento presentado este miércoles ante el mercado que, en este momento, sus fundamentales financieros son más fuertes y resilientes, con una estrategia de creación de valor a medida y una estricta política de gestión de capital. Aspectos que han permitido a la compañía plantear unos objetivos más ambiciosos y robustos, con el foco en un crecimiento mayor del 10% del flujo de caja. Esta evolución será la que permita aumentar la generación de caja desde los aproximadamente 4.000 millones de euros previstos para este 2023 hasta los 5.000 millones de euros en 2026. El flujo de caja se afianza como una prioridad para Telefónica y una referencia primordial en el plan GPS para seguir reduciendo su deuda, atender los compromisos financieros y garantizar el dividendo a sus accionistas. 

La multinacional defiende que su balance, actualmente sólido, le permite hacer frente a un entorno macroeconómico dinámico. Asimismo, la situación financiera de la compañía le dota de flexibilidad para acceder a los mercados financieros en los próximos años, y cuenta con una liquidez suficiente para cubrir el calendario de vencimientos existente en este momento. Al cierre del tercer trimestre, Telefónica disfruta de una posición de liquidez de 20.772 millones de euros, mientras que los vencimientos acumulados en los tres próximos ejercicios se sitúan en los 10.300 millones de euros.

La compañía prevé un mayor crecimiento en Telefónica Tech y Telefónica Infra

Dentro del plan estratégico presentado este miércoles por Telefónica, su unidad estratégica de servicios digitales, Telefónica Tech, mantiene un papel clave en los objetivos anunciados para los próximos tres años. Lanzada precisamente como uno de los ejes principales del plan de acción de 2019, en los últimos años la filial tecnológica de la teleco ha protagonizado una sólida historia de crecimiento que tendrá continuidad en el periodo 2023-2026. Las previsiones pasan por alcanzar una tasa anual media de crecimiento del 18%, por encima del mercado, para terminar 2026 con unos ingresos de 3.000 millones de euros en Telefónica Tech. 

Por su parte, Telefónica Infra, creada en 2019 para aflorar y desarrollar el valor de las infraestructuras de telecomunicaciones de la compañía, prolongará la expansión que ha protagonizado en los últimos años. Según el plan GPS de Telefónica, en 2026 la huella de fibra hasta el hogar (FTTH) de la unidad estratégica alcanzará aproximadamente los 30 millones de unidades inmobiliarias (UUII), frente a los 20 millones actuales. Este incremento contribuirá a que el volumen total de UUII pasadas con fibra hasta el hogar en el conjunto del grupo supere los 100 millones en 2026.

La sostenibilidad se mantiene como otro de los pilares fundamentales para Telefónica en el plan 2023-2026. La compañía acelerará su sólido desempeño en cuestiones medioambientales, sociales y de gobernanza, con especial foco en sus trabajadores. Telefónica se mantiene firme en su objetivo de alcanzar emisiones netas cero en 2040, sobre la base de las renovables, la eficiencia y la circularidad.

En cuanto a gobernanza, continuará fortaleciendo la compañía a través del compromiso de alcanzar la paridad de género en los máximos órganos de gobierno en 203 y defiende su esfuerzo para acelerar el crecimiento de las personas fomentando la diversidad, la movilidad y el reskilling, con el propósito de ganar en agilidad y garantizar una gestión responsable de la transición digital con una plantilla motivada. Por otro lado, la operadora intensificará su colaboración con la industria, con el fin de liderar el proceso de lograr un entorno regulatorio más justo para el sector, una de las peticiones más repetidas del sector en los últimos años.