Repsol abandona su negocio de exploración y producción de Canadá. Así lo ha anunciado la compañía a primera hora de la mañana con una operación valorada en alrededor de 433 millones de euros, 468 millones de dólares al cambio de moneda. La multienergética, en su camino hacia la descarbonización y las cero emisiones netas, ha optado por vender todos sus activos de petróleo y gas en el país canadiense a la empresa local Peyto como parte de la gestión dinámica de su cartera para centrar su actividad en las regiones consideradas clave para la compañía. 

El traspaso de activos entre Repsol y Peyto incluye todos los derechos mineros, instalaciones e infraestructuras relacionadas con el negocio canadiense de exploración y producción de petróleo y gas, entre los que se incluyen los activos del área Greater Edson, con una producción neta de 23 kbep/d, principalmente gas. Repsol está inmersa en un plan de reorganización para priorizar sus mercados clave, reenfocando con ello su cartera de exploración y producción mediante la rotación de activos. El mercado ha recibido positivamente la salida de Repsol del mercado canadiense, con una subida de la acción del 0,29% en los primeros momentos de la sesión para cotizar en los 14,63 euros por título. 

La multienergética da un paso más en su plan de reorganización, con preferencia por países de la OCDE y, especialmente, por Estados Unidos. El país norteamericano es uno de los mercados prioritarios para Repsol a nivel mundial, donde la energética ha puesto su foco por haber construido ya una posición capaz de generar sinergias y, por tanto, "mayores ventajas competitivas", por lo que la compañía de Brufau mantendrá su negocio al otro lado del Atlántico a pesar de su salida del mercado canadiense. 

Repsol avanza en su reorganización 

La salida de Repsol del mercado de exploración de petróleo y gas de Canadá no es la primera que realiza la compañía en los últimos años, sino que completa una lista en la que ha ido reduciendo, paulatinamente, su presencia en los países en los que desarrolla sus actividades de exploración y producción. Desde la compañía defienden que la racionalización del portafolio se ha efecutado a través de una serie de desinversiones en lugares no estratégicos como son Vietnam, Malasia, Papúa Nueva Guinea, Australia, Grecia, Marruecos, Irak, Bulgaria, Ecuador o Rusia.

En cifras, Repsol ha reducido su presencia en el negocio de exploración y producción de 25 a 14 países en los últimos años tras vender sus activos de petróleo y gas en estos mercados mientras, en paralelo, aumentaba su operativa y los nuevos desarrollos en áreas clave para la compañía como Estados Unidos y Brasil. Un plan que se ha completado con varias adquisiciones selectivas en activos no convencionales y en aguas estadounidenses.

La experiencia y el know how de Repsol, que han permitido a la compañía realizar algunos de los descubrimientos de hidrocarburos más significativos de la última década, ha permitido que la cartera de exploración haya generado "numerosas oportunidades" de negocio ahora desarrolladas. Desde 2020, Repsol ha realizado 14 hallazgos que han añadido importantes recursos energéticos, principalmente en Estados Unidos y México, cuyo desarrollo contribuirá a mantener los actuales niveles de producción hasta el final de la década.

Cero emisiones netas, la clave del plan de Repsol

Además de la desinversión en mercados internacionales por motivos de negocio, y en línea con el Plan estratégico 2021-2025 de Repsol, su negocio de Exploración y Producción también está en camino de convertirse en líder en la reducción de emisiones de CO2 en el sector, con el objetivo de reducir su intensidad de carbono en un 75% para 2025, a partir de una línea base de 2016. La compañía centra este objetivo a través de un enfoque en activos con menos emisiones por barril mientras, en paralelo, se maximiza y mejora la eficiencia y la innovación en los procesos utilizando tecnología de última generación y herramientas digitales, así como el desarrollo de proyectos asociados para capturar y almacenar CO2.

El valor de la actual cartera de activos y la estrategia a largo plazo de Repsol para su negocio de Exploración y Producción se visibilizaron también a través de la asociación con EIG, que adquirió una participación del 25% por 4.800 millones de dólares, valorando la unidad en 19.000 millones de dólares y superando el consenso de los analistas. Este acuerdo ha permitido a la compañía avanzar en su objetivo de cero emisiones netas a través de un proyecto que acelera la transformación y refuerza su perfil multienergético, al tiempo que reduce el apalancamiento y la deuda y mantiene un fuerte flujo de caja para financiar un ambicioso crecimiento y una atractiva retribución al accionista.

Hasta este momento, Repsol ha desarrollado sus operaciones comerciales y logísticas en Canadá a través de su instalación de GNL St John y su negocio de trading. Ahora, se prevé que el traspaso de todos los activos se cierre a mediados del próximo mes de octubre, sujeta a las condiciones de cierre habituales en estas operaciones, incluida la recepción de las aprobaciones regulatorias necesarias. Por su parte, RBC Capital Markets ha actuado como asesor financiero de Repsol en la operación.